Probamos el SEAT Tarraco: un SUV de siete plazas, 100% digital y con un diseño que anticipa el futuro de SEAT
El tercer SUV de SEAT está cada día más cerca. El lanzamiento del nuevo SEAT Tarraco está previsto para febrero de 2019 con un precio de tarifa desde 32.650 euros, aunque ya hemos podido conocerlo de primera mano y ponernos al volante para contaros nuestras primeras impresiones.
A día de hoy los modelos con carrocería de tipo SUV ya son los más vendidos del mercado español, pero es que además el fabricante prevé que el segmento del Tarraco, de todocaminos de más de 4,5 metros de largo y siete plazas, crezca de manera exponencial (un 40%) de aquí al año 2025.
Hablamos por tanto de un SUV grande, de 4,74 metros de largo, que dispone de configuración interior de 5 ó 5+2 plazas, además de un enorme maletero y una gran dotación tecnológica, que incluye elementos de serie como faros y pilotos LED, cuadro de instrumentos digital, pantalla multimedia de 8 pulgadas o diversos asistentes de conducción.
Sus rivales más directos en el mercado de SUV de siete plazas son, en principio, tanto sus propios primos Volkswagen Tiguan Allspace y Skoda Kodiaq, como el Peugeot 5008, el Honda CR-V, el Nissan X-Trail o el Mitsubishi Outlander, por poner algunos ejemplos. Veamos ahora en detalle qué propone este nuevo SEAT Tarraco, basado en la plataforma MQB-A LWB del grupo Volkswagen.
Diseño con vistas al futuro de SEAT
Probablemente lo más interesante de este SEAT Tarraco, diseñado en Barcelona y fabricado en Wolfsburgo, Alemania, es que adelanta el futuro diseño del resto de modelos de la marca. La nueva generación del SEAT León que conoceremos en 2019, por ejemplo, gozará de un aspecto similar a este Tarraco: parrilla, faros, firma lumínica, etc...
El frontal es a nuestro parecer lo más atractivo del coche, tanto por el diseño de los nuevos Faros LED o el musculoso capó, como por la parrilla hexagonal también de nueva factura -y bastante más trabajada en cuanto a acabados, según SEAT-, que llegará además al resto de modelos futuros de la gama. En general, tiene personalidad propia y un aspecto que lo diferencia del resto de la familia.
En la zaga, los pilotos LED son de serie en ambos acabados (Style y Xcellence) y están unidos visualmente mediante un listón reflectante, de manera que ocupan toda la anchura del vehículo, Por primera vez en SEAT, además, se incluyen intermitentes dinámicos. Las salidas de escape, al menos en estos dos acabados (el FR llegará más adelante), son falsas, es decir, embellecedores.
Por último, la gama del SEAT Tarraco ofrece llantas de hasta 20 pulgadas, aunque de serie son de 17 pulgadas. También hay disponibles ocho colores de carrocería: Dark Camouflage, Blanco Oryx, Plata Reflex, Azul Atlantic, Gris Indium, Beige Titanium, Negro Deep y Gris Urano.
Un interior para toda la familia
Según el propio fabricante, el objetivo del SEAT Tarraco es ser un SUV premium, con un habitáculo cuidado, tanto por materiales como por nivel de acabados, y lo cierto es que es un interior bien resuelto, con tapicerías muy interesantes (sobre todo en el acabado Xcellence) que también se extienden a las molduras de las puertas, o listones decorativos para el salpicadero en aluminio o símil madera, pero de buen aspecto y tacto en cualquier caso.
El espacio en el habitáculo es bastante bueno, tanto delante como detrás, ya que hay hueco más que suficiente para las piernas y la cabeza también en la segunda fila de asientos, gracias en parte a la batalla de 2,79 metros y también al hecho de que ésta fila se puede desplazar longitudinalmente para ganar algo de espacio para las rodillas.
Como es lógico, la tercera fila de asientos es la menos práctica y, aunque pueden entrar dos adultos, hay poco espacio para las piernas -ideal para niños, eso sí-, si bien podemos ganar algo al mover longitudinalmente la segunda fila de asientos. Cabe apuntar que el Tarraco puede equipar una rueda de repuesto de tipo galleta bajo el suelo del maletero incluso en las versiones de siete plazas.
En todo caso, el acceso a la última fila de asientos tampoco es del todo cómodo, como es habitual en este tipo de modelos de siete plazas. Los dos últimos asientos se pueden abatir, dejando un fondo del maletero que no es completamente plano, y para colocarlos de nuevo hay que hacerlo manualmente, mediante un tirador de tela.
Una de las principales bondades de este nuevo SUV de SEAT es su capacidad de carga, ya que en configuración de cinco plazas el maletero ofrece 760 litros de volumen, con un máximo de 1.920 litros con la segunda fila abatida. La versión de siete plazas ofrece 700 litros con los dos últimos asientos plegados, 230 litros con los siete en uso y un máximo de 1.775 litros. Además, el portón puede ser eléctrico y con función "manos libres".
Mucha tecnología y todo digital
Ya desde la versión más básica o Style, el SEAT Tarraco incorpora de serie el cuadro de instrumentos digital o Digital Cockpit de 10,25 pulgadas, así como la pantalla flotante del salpicadero, táctil y de 8 pulgadas, compatible además con Apple Car Play, Android Auto y Mirror Link. El asistente de voz Amazon Alexa también está disponible con el navegador opcional Navi System Plus.
Asociado a este último sistema opcional encontramos también otra novedad: el control gestual de la pantalla, a través del cual ciertas funciones básicas se pueden controlar realizando gestos delante de la propia pantalla, si bien SEAT aún no ha detallado su funcionamiento o qué parámetros se pueden ajustar mediante este sistema.
Por supuesto, tampoco faltan sistemas de asistencia a la conducción como la cámara de 360 grados, el asistente de atascos o el asistente precolisión con llamada de emergencia automática (E-call). Son de serie el asistente de frenada automática con detección de peatones o el asistente de cambio involuntario de carril, y el acabado Xcellence incluye además el control de crucero adaptativo.
En opción están disponibles desde el asistente de ángulo muerto o la alerta de tráfico cruzado trasero hasta el reconocimiento de señales de tráfico, luces automáticas, detector de vuelvo (Rollover Assist) o el sistema de aparcamiento automático Park Assist.
Cuatro motores y un futuro híbrido enchufable
SEAT ya ha anunciado la llegada en 2020 de un híbrido enchufable a la gama Tarraco, con una potencia del orden de 210 CV, aunque de momento no han querido dar más detalles al respecto. Lo que sí sabemos es que la oferta actual cuenta con dos opciones gasolina y dos diésel.
- 1.5 TSI 150 CV: La opción de acceso es el bloque 1.5 litros de cuatro cilindros que ya ofrecen el Ibiza y el León, por ejemplo. Alcanza esos 150 CV entre 5.000 y 6.000 rpm, y desarrolla un par motor máximo de 250 Nm entre 1.500 y 3.500 vueltas. Únicamente puede ir asociado a cambio manual de seis marchas y tracción delantera, y promete un 0 a 100 km/h en 9,7 segundos y una velocidad máxima de 201 km/h. Homologa entre 6,3 y 6,6 litros a los cien kilómetros, en función de la configuración de asientos.
- 2.0 TSI 190 CV: El motor gasolina más potente es un bloque de 2 litros, con 190 CV entre 4.200 y 6.000 rpm, y un par máximo de 320 Nm desde 1.500 hasta 4.100 vueltas. En este caso se asocia al cambio automático DSG de doble embrague y siete velocidades, así como al sistema de tracción total 4Drive. Despacha el 0 a 100 km/h en 8 segundos y roza los 211 km/h. De momento no hay cifras de consumo homologado.
- 2.0 TDI 150 CV: También de cuatro cilindros, el 2 litros turbodiésel se ofrece en dos potencias. El básico ofrece 150 CV entre 3.500 y 4.000 vueltas, así como 340 Nm entre 1.750 y 3.000 rpm. Necesita 9,8 segundos para acelerar de 0 a 100 km/h y su velocidad punta es de 202 km/h. En este caso puede ser manual de seis marchas y tracción delantera, o bien DSG y tracción integral (198 km/h de velocidad máxima en este caso). El consumo medio es de 4,9 litros (manual).
- 2.0 TDI 190 CV: El diésel más potente alcanza 190 CV entre 3.500 y 4.000 vueltas, un par motor máximo de 400 Nm entre 1.750 y 3.250 rpm, y va asociado exclusivamente al cambio DSG y la tracción 4Drive. En este caso el 0-100 km/h lleva 8 segundos y la velocidad punta es de 210 km/h. Homologa un consumo medio de 5,6 litros a los cien kilómetros.
Además, SEAT ofrece de serie el selector de modos de conducción SEAT Drive Profile, que ofrece cuatro modos para las variantes de tracción delantera (Eco, Normal, Sport e Individual) y añade otros dos en las versiones de tracción total 4Drive (Off-Road y Nieve). En el acabado Xcellence se ofrece la suspensión adaptativa DCC, con amortiguadores de dureza variable.
Al volante del SEAT Tarraco
Lo primero que llama la atención al subirse al SEAT Tarraco, además de la buena calidad general de su habitáculo y el gran aspecto gracias sobre todo al salpicadero 100% digital, es la elevada posición de conducción, un rasgo que entendemos que el cliente aprecia en un coche de este tipo. En cualquier caso, incluso con el asiento a su mínima altura resulta demasiado alta a nuestro gusto.
En marcha nos encontramos con un SUV bien insonorizado, suave y bastante cómodo, que además muestra cierta agilidad en tramos de curvas a pesar de su tamaño, sobre todo en la versión de gasolina con tracción delantera, cuyo peso es de 1.599 kilogramos (el más ligero de la gama).
Durante esta primera prueba hemos podido conducir el Tarraco de acceso, con motor 1.5 TSI de 150 CV, que se antoja algo modesto para un coche así. Hasta las 1.500 rpm está bastante vacío y llegado este momento empieza a empujar bien, pero lo cierto es que en pendientes pronunciadas o incluso a 120 km/h en sexta velocidad en autovía nos obliga a reducir una o dos marchas para obtener la respuesta deseada. El consumo medio, con mucho tramo de montaña, ascendió a 8,2 litros a los cien kilómetros.
Quizá esto tenga más que ver con la relación del cambio manual de seis velocidades, de marchas muy largas, que con las capacidades del propio motor, pero en la práctica debemos recurrir al cambio constantemente si queremos aprovechar el potencial del motor. En general no nos ha disgustado, pero quizá no sea el ideal para circular cargado o con las siete plazas ocupadas.
También pudimos probar el 2.0 TDI de idéntica potencia, 150 CV, que goza de un par motor más generoso y por tanto es más capaz a la hora de mover con soltura al Tarraco, con una respuesta más inmediata. En este caso se trataba de una variante de tracción total 4Drive y asociada al cambio DSG, y a pesar del peso extra nos ha resultado una mejor opción para este SUV.
Por tanto, a igualdad de potencia nos ha parecido un propulsor más apto para largos viajes o para circular cargados (ya sean pasajeros o equipaje), y además su consumo es bastante inferior. En un recorrido casi en su totalidad por vías rápidas, no comparable al anterior en ningún caso, el ordenador nos devolvió una media de 5,5 litros a los cien kilómetros.
En definitiva, el SEAT Tarraco nos ha gustado bastante tanto por su diseño (especialmente el frontal) como por su interior, cargado de tecnología y con una calidad a la altura de lo que prometía este producto. A falta de probar la variante 2.0 TSI de 190 CV, el 2.0 TDI nos parece la opción más interesante, por consumo y respuesta general.