Probamos el Jaguar F-Type 400 Sport, el 'After Eight' de 400 CV que solo durará un año
Han pasado ya algunos años desde la vuelta de Jaguar al segmento de los coches deportivos biplaza. El arma elegida para la vuelta ha sido el espectacular Jaguar F-Type, un elegante deportivo que deslumbró desde el momento en que se presentó en sociedad.
Llamado a rememorar las gestas del Jaguar E-Type, el histórico icono de la marca británica, el F-Type ha madurado hasta tal punto que ya se permiten lanzar una interesante versión limitada en el tiempo que bajo el nombre 400 Sport, equipa el motor V6 de 3.0 litros con compresor, desarrolla 400 caballos de potencia y tal vez sea el F-Type más equilibrado. Apetece probarlo, ¿verdad?
Estéticamente el Jaguar F-Type destaca por la elegancia de su estilizada carrocería. Su silueta está muy marcada por el morro prominente y largo, un habitáculo muy retrasado y los trazos que recuerdan los deportivos antaño nacidos para el disfrute al volante.
Viéndolo es fácil que tu mente se vaya al E-Type, sobre todo cuando observas la trasera, donde la cintura muy alta, especialmente en esta carrocería Coupé (también existe en versión Cabrio 400 Sport), están inequívocamente inspiradas en el clásico que Enzo Ferrari apodó como “el coche más bello jamás fabricado”.
Las ópticas delanteras de LED forman parte de la completa dotación de serie de esta versión. En los laterales del paragolpes delantero encontramos dos entradas de aire en color negro, de mayor tamaño las del resto de versiones V6, con las que el aspecto es más deportivo, aunque destacan poco cuando se elige el color negro Santorini de los tres disponibles (los otros son plata y blanco Yulong) en el 400 Sport.
En el negro Santorini lo que sí destaca de sobremanera son los logotipos '400 Sport' dispuestos en el labio inferior del faldón delantero, específico de esta versión y que ayuda a ganar apoyo aerodinámico a alta velocidad, así como en la trasera o en las pinzas de freno.
Las llantas oscuras de 20 pulgadas en diseño de cinco radios son también exclusivas para esta versión y en su interior esconden un equipo de frenos sobredimensionado con discos de 380 mm. de diámetro en la parte delantera y discos de 376 mm. de diámetro en la trasera.
Si tienes previsto usar el coche en circuito, en la lista de extras puedes seleccionar un equipo de frenos carbono cerámicos con discos de discos delanteros de 398 mm. de diámetro y traseros de 380 mm. de diámetro con pinzas monobloque de 6 pistones en amarillo delante y 4 pistones en la trasera.
Los frenos carbono cerámicos forman parte de un pack que también incluye otras llantas de 20 pulgadas con diseño de 5 radios en color negro metalizado. El capricho cuesta 13.911 euros, pero además de mejorar el rendimiento en uso exhaustivo, también permiten ahorrar hasta 21 kilos de peso suspendido.
El techo es de chapa de serie, pero en opción también se puede elegir en cristal panorámico (1.379 euros) o incluso en fibra de carbono (3.601 euros).
La parte posterior del vehículo rezuma elegancia británica lo veas por donde lo veas. A pesar de los colores oscuros aplicados en su carrocería, es capaz de girar las cabezas de cualquier peatón que pase cerca. Queda integrado en la tapa del maletero el alerón activo que de despliega al pasar de 120 km/h.
La doble salida de escape en el centro, con dos gigantescas tuberías de muchos milímetros de diámetro, en cualquier otro deportivo serían un elemento ‘macarra’, pero en este F-Type 400 Sport están tan bien integradas que llaman la atención lo justo y necesario. ¿Elegancia británica? Eso parece.
Interior de magnífica factura
Si el exterior del Jaguar F-Type 400 Sport nos ha conquistado con sus detalles, es pasar al interior y caer rendido a sus encantos. La configuración biplaza del F-Type le permite, gracias a su tamaño de 4,4 metros de largo y 1,9 de ancho, disfrutar de un habitáculo lo suficientemente amplio para dos pasajeros, contando con un maletero de 310 litros en la trasera, más que suficiente para las maletas de ambos ocupantes.
Para abrir la puerta hay que pulsar la manilla de apertura, que es táctil y se despliega hacia fuera para que puedas tirar de ella. Comienza entonces la maniobra de contorsionismo a la que obliga, como buen deportivo biplaza que es.
Una vez que has sentado tus posaderas sobre los magníficos asientos deportivos tipo baquet específicos para el 400 Sport, capaces de sujetar tu cuerpo incluso en los apoyos más fuerte y con una calidad de acabado digna de los mejores coches de su segmento, los cuales destacan por detalles como las costuras en color amarillo y el logo 400 Sport sobre el reposacabezas, es fácil encontrar la posición de conducción que invita a pilotar.
Con el trasero muy abajo, las piernas estiradas y el morro largo por delante, la postura de conducción del el Jaguar F-Type tiene cierto sabor a deportivo auténtico, de los de antaño. Me gusta la posición porque permite ‘sentir conexión’ con el resto del conjunto, con el trasero apoyado en el eje posterior y múltiples reglajes eléctricos de asiento y columna de dirección para que la adaptes hasta el más mínimo milímetro.
El volante de piel tiene un aro gordo, con muy buen tacto, pero la parte inferior es plana. El logotipo '400 Sport' en el brazo inferior y las costuras amarillas vuelven a ser específicas de esta edición especial. Se trata de un volante multifunción, con muchos botones que obligan a adaptarte a ellos antes de empezar a manejar los distintos sistemas del vehículo.
Por lo demás, la calidad de los materiales elegidos para el habitáculo es muy alta, con todo el salpicadero forrado en piel con las costuras destacando en color amarillo.
La consola central, muy alta y ancha, dispone de un sistema que permite esconder las salidas de aireación cuando el climatizador está desactivado, dejando un salpicadero de aspecto muy limpio, elegante y acogedor.
En marcha con el F-Type 400 Sport
Para que la fiera cobre vida, hay que pulsar un discreto botón Start situado al lado de tu mano derecha, junto a la palanca selectora del cambio automático Quickshift de 8 velocidades. Entonces el motor 3.0 V6 dejará claro que está listo para dar lo mejor de sí con un rugido que acompaña a una subida y bajada de vueltas tan bestia que impide pasar desapercibido allá donde lo enciendas.
El F-Type 400 Sport entrega 20 caballos más que las versiones 3.0 V6 normales, y se da la circunstancia de que solo estará disponible durante un año, por lo que pasado ese tiempo deberás optar entre las versiones básicas 2.0 de 300 CV, los V6 de 340 CV ó 380 CV o irte a un escalón muy superior con las motorizaciones V8 de 550 CV en el caso del R o 575 CV en el superclase SVR.
Con esa 400 CV de potencia y posibilidad de elegirlo en configuración de tracción trasera o integral AWD, el F-Type 400 Sport sobre el papel se antoja como la versión perfecta y más equilibrada de toda la gama.
El murmullo del motor V6 acompaña siempre, en cualquier circunstancia. En uso urbano, has de acostumbrarte a ser el centro de atención allá por donde pases, pero frente a otros superdeportivos de su mismo segmento, en este caso los comentarios respecto a su elegancia son mayoría.
Lógicamente no es un coche especialmente cómodo para el día a día, ni pretende serlo. Vas sentado muy bajo, sus dimensiones hacen que maniobrar en calles estrechas sea especialmente delicado, pero en ningún caso podemos considerarlo un modelo crítico y poco aconsejable para quien quiera un deportivo para el día a día.
Usándolo como coche de diario, sentirás que las suspensiones son bastante permisivas a la hora de transmitir las irregularidades del asfalto al habitáculo. Además la cámara de visión trasera, con una magnífica calidad de imagen, ayuda a que aparcarlo no sea tarea de riesgo para su bonita y estilizada carrocería.
Por lo demás, en uso mixto urbano e interurbano, el F-Type 400 Sport se desenvuelve con bastante soltura, gracias a un motor que si bien no tiene en bajas revoluciones la fuerza de los modernos bloques turboalimentados, sí que entrega la fuerza necesaria para moverse una soltura más que suficiente.
Una carretera de curvas y una tarde para disfrutar
Después de varios días usando el Jaguar F-Type 400 Sport como coche de diario y de hartarme de responder a las múltiples preguntas de los curiosos cuando ven el F-Type, llegó por fin el día de irnos el felino británico y yo a hacer lo que hay que hacer con un coche de estas características: conducirlo por carreteras de curvas hasta que el cuerpo diga basta.
Aprovechando que el otoño está tardando más de lo previsto en hacer acto de presencia, me escapé una tarde después de trabajar hacia algunas de mis carreteras favoritas de la Sierra de Madrid en su cara norte, la cual estaba desierta en un día entre semana como el elegido.
Igual que le ocurrió a Javier Álvarez cuando probó la versión R del Jaguar F-Type con motor V8, el ronroneo del motor 3.0 V6 se vuelve especialmente adictivo en esta versión 400 Sport. Forma parte del equipamiento de serie el modo deportivo de los escapes, el cual se activa pulsando el botón específico dispuesto en el salpicadero o seleccionando el modo Dynamic. Por supuesto, lo llevé siempre activado.
Con las mariposas de los escapes abiertas, el sonido metálico del motor subiendo de vueltas con fuerza y constancia hasta unas casi infinitas 6.500 RPM, te invita a hacerle estirar una y otra vez mientras se dibuja una sonrisa en la cara.
Piso a fondo el acelerador mientras el eco del V6 se amplifica por la ladera de aquella preciosa montaña. El F-Type avanza con fuerza y decisión. Por la forma en que entrega la potencia y cómo sube de vueltas parece un motor V6 atmosférico de los de antaño. Es difícil creer y percibir que realmente cuenta con compresor. Tanto es así que cuando llegué de vuelta a casa tuve que confirmar que la información era correcta.
Con esa configuración de motor, un peso de 1.675 kilos y tracción a las cuatro ruedas AWD, no esperes que este sea el coche más rápido de su segmento, porque no pretende serlo. Las cifras oficiales hablan de 0 a 100 km/h en 5,1 segundos y lógicamente no son registros récord. Por ejemplo el Audi TT RS Coupé que probé la semana pasada baja casi 1,5 segundos en este registro a igualdad de potencia.
Pero realmente esta versión no pretende competir cara a cara con coches como el TT RS o el Porsche 911, ya que no tendría sentido hacerlo. En su lugar lo que sí que hace este F-Type 400 Sport, es transmitir grandes dosis de adrenalina y diversión a quien lo conduce y dibujarte una sonrisa en la cara cada vez que estiras desde abajo las marchas.
Estirar todas y cada una de las 8 velocidades de la caja de cambios Quickshift, perfectamente puesta a punto y con una respuesta inmediata a las órdenes recibidas a través de las levas del volante, se convierte en algo especial.
A alta velocidad, el conjunto es capaz de transmitir grandes sensaciones. La dirección inicialmente se percibe poco comunicativa, pero a medida que pasan los kilómetros y los giros, parece que la conexión entre él y yo mejora y nos acabamos entendiendo muy bien.
Esa confianza va generándose porque el conjunto parece ir literalmente sobre raíles. Durante los primeros kilómetros tenía miedo de estar al volante de otro GT grande, pesado y aburrido, pero por suerte todo pareció ser un espejismo.
La velocidad de paso por curva que permite es muy alta, y las sensaciones de sobrepeso iniciales van desapareciendo a medida que encontramos el equilibrio entre las frenadas, las trasferencias de pesos y los giros de volante.
Por su configuración V6 y un par motor relativamente discreto de 450 Nm entre las 3.500 y las 5.500 RPM, o bien hilas fino para llevarlo en la ventana óptima de revoluciones a la salida de las curvas, o tendrás que estrujar el pedal derecho a fondo para recuperar el ritmo perdido cuando entras en curva más lento de lo que deberías o en una marcha más larga de la ideal.
En este sentido, el F-Type 400 Sport es un coche exigente. Has de ser piloto de los de antaño para sacar lo mejor de él, ya que hoy en día las mecánicas turboalimentadas de geometría variable con mucho par desde bajas revoluciones, permiten errores de pilotaje que coches como el que hoy nos ocupa no pasan por alto.
Así pues, puede llegar a parecer un coche poco efectivo o que no corre demasiado para su potencia, pero no nos engañemos. Gracias a su fantástica puesta a punto de chasis y suspensiones, un piloto experimentado puede ir a un ritmo muy alto con este británico de aspecto elegante.
Es más, me atrevo a decir que después de unas cuantas horas de conducción, es difícil que eches en falta más potencia. Por contra, lo que estarás es disfrutando de un modelo con la mágica propiedad de entregar grandes dosis de diversión sin tener que ir a velocidad excesiva, y eso en los tiempos que corren es toda una bondad.
Jaguar F-Type: nuestra puntuación
.8
A favor
- Estética con personalidad
- Calidad de materiales
- Edición limitada
- Sonido del motor
- Acabados
En contra
- Menús lentos
- Volante plano abajo
- Precio alto
Esta versión 400 Sport del Jaguar F-Type no debe considerarse una edición limitada sin más. Su peculiar personalidad marcada por los pequeños detalles a nivel estético, la magia de un motor V6 que engancha con su forma de entregar la potencia y una puesta a punto de chasis y suspensiones que permite ritmos muy altos en curvas, hacen que sea más efectivo de lo que inicialmente pensaba.
A mayores su exclusividad al estar limitdo a un año de producción convertirá al Jaguar F-Type 400 Sport de aquí a unos años en una de esas ediciones muy buscada por los coleccionistas de coches exóticos, y más si tenemos en cuenta que su sustituto será híbrido. La única pena es que no lo hayan hecho con caja de cambios manual, porque me atrevo a decir que rozaría la perfección.
Ficha técnica
Versión probada | 400 Sport Coupé | |||
Cilindrada | 2.995 cm³ | Tipo de tracción | AWD opcional | |
Bloque motor | 6 cilindros en V | Combustible | Gasolina | |
Potencia (CV @ rpm) | 400 @ 6.500 | Capacidad del depósito | 70 litros | |
Par motor (Nm @ rpm) | 460 @ 3.500 - 5.500 | Consumo urbano | 12,4 l/100 km | |
Masa en vacío | 1.674 kg | Consumo extraurbano | 6,9 l/100 km | |
Velocidad máxima | 275 km/h | Consumo combinado | 8,9 l/100 km | |
Aceleración 0-100 km/h | 5,1 segundos | Capacidad maletero | 310 litros | |
Transmisión | 8 marchas Quickshift | Precio | 120.700 euros |
El coche para esta prueba ha sido prestado por Jaguar. Para más información consulta nuestra guía de relaciones con empresas
Fotografía | Héctor Ares