Sí, el Volkswagen I.D. BUZZ es mucho más que la Kombi hippie del Siglo XXI
La progresiva electrificación de los modelos del grupo Volkswagen es inevitable; o la de cualquier fabricante, de hecho. (En el caso de Volkswagen, el Dieselgate sólo ha acelerado un proceso ya previsto e iniciado anteriormente). Así, su última propuesta de coche eléctrico y autónomo es el I.D. BUZZ.
Este concept car, destinado a enseñarnos las posibilidades de la plataforma MEB para coches eléctricos del grupo, apuesta por un diseño y un concepto descaradamente inspirado en el icónico T1 ("Bulli", para los alemanes), es decir, el Transporter (o Kombi) original. ¿Podría el I.D. BUZZ replicar el éxito de las diferentes generaciones de Transporter?
Todo es cuestión de imagen
Muchas son las marcas que han querido revivir un diseño o un concepto que tanto éxito tuvo en el pasado. El mundo del automóvil está lleno de ejemplos, Ford Mustang, Fiat 500 y MINI son los más evidentes. Los modelos originales fueron un éxito, alcanzando el nivel de icono, y las versiones actuales son otro éxito. Entonces, ¿es tan sencillo como hacer una carrocería que recuerda a la del modelo original para lograrlo? En realidad no.
En esto del neo-retro, hacer un modelo actual pero con estética retro, preferiblemente de un modelo icónico, también hay fracasos. Ford, justamente, que tanto éxito cosechó con el primer Ford GT (evocación del GT40) y el Mustang a partir de 2005, también vio como otro de sus diseños neo-retro no gustaba. El Ford Thunderbird de 1955-1957 dio lugar a uno de los modelos más aclamados de Ford que duró hasta 1997, aunque entre 1967 y 1997, sólo una de las seis generaciones tuvo realmente éxito. Hasta que en 2002, Ford decidió crear un nuevo Thunderbird, con plataforma Lincoln, V8 Jaguar (bajado de 4.0 litros a 3.9 litros) y estética inspirada en el modelo original. Las ventas nunca alcanzaron el nivel proyectado por Ford y en 2005, Ford retiró el coche de la fabricación.
Incluso en Volkswagen tenemos un ejemplo de medio éxito, el Beetle. Inicialmente, el coche fue un éxito en todos los mercados donde se vendió y aunque la actual generación sigue cosechando buenas cifras de venta en Estados Unidos, en Europa Volkswagen tuvo que rebajar sus expectativas ya que en Alemania y otros países del norte de Europa, el Beetle no terminaba de convencer. Y es que muchos asociaban el Beetle a su antepasado y a la Segunda Guerra Mundial.
Para que un modelo neo-retro funcione debe capitalizar una imagen indudablemente positiva reconocida por toda la sociedad. El Thunderbird llamaba la atención a los fans del modelo original, mientras que el Volkswagen Beetle le recordaba a otros una época oscura y vergonzosa. El Ford Mustang es un icono. Quién no ha visto la persecución en Bullitt con el King of Cool en persona, Steve McQueen, al volante de un Mustang. El Mini, con su reducido tamaño y su pasado deportivo gusta tanto a los petrolheads como a los más urbanitas por su capacidad de moverse por las grandes urbes con un lujo muy británico. En cuanto al Fiat 500, recuerda una época positiva en Italia y, por asociación con el SEAT 600, también en España: la del avance económico del país. Por fin las clases medias tenían acceso a un coche; es un mensaje muy positivo y potente. Además, sus pequeñas dimensiones lo convierten en un coche ideal para la ciudad.
Si el I.D. BUZZ es el sucesor del Kombi, ¿también es hippie?
El Volkswagen Transporter, a diferencia del Beetle, goza de una imagen positiva también en Alemania y en Europa en general. De simple vehículo industrial ligero exclusivamente disponible en el mismo azul que los monos de trabajo de los obreros pasó a ser un símbolo de rebelión y apertura de la sociedad, gracias al movimiento hippie en Estados Unidos, para terminar siendo un símbolo de libertad más allá de lo político, como la libertad a la hora de viajar, con una versión autocaravana, como la California, o simplemente tirando un colchón en la parte trasera y cargando las tablas de surf en el techo.
Y no es sólo una cuestión de libertad social o política, como lo era el movimiento hippie y pacifista en los años 60-70 del siglo pasado. En la actualidad, las posiciones naturistas que predicaban los hippies son cada vez más importantes en nuestra sociedad. Fuera del automóvil lo vemos con los productos "bio", procedentes de cultivos ecológicos, o incluso la proliferación de los huertos urbanos (aunque éstos no sean necesariamente buenos para nuestra salud). En el terreno automóvil, la movilidad eléctrica es vista como la solución a los males de nuestro clima. En este aspecto, el I.D. BUZZ reanuda con la vertiente hippie de su ilustre predecesor.
Rápido, amplio y de emisiones cero
El I.D. BUZZ se beneficia de la imagen positiva del Bulli original. Pero también tiene que responder a una necesidad del mercado, como lo hacen los MINI y Fiat 500 (coches urbanitas) y el Mustang (potente V8 a precio de GTI, o casi). Y en ese aspecto, el I.D. BUZZ también tiene una buena baza por su condición de coche eléctrico y autónomo, que le permite ser a la vez vehículo de trabajo y de ocio.
Con una batería de 111 kWh situada en el suelo -que garantiza un bajo momento polar de inercia por si quieres "hacer curvas"- y dos motores eléctricos de 150 kW cada uno que entregan una potencia combinada de 374 CV, el I.D. BUZZ es rápido (0-100 km/h en 5 s) y tiene una autonomía de más de 400 km. No solamente ofrece una autonomía digna de un coche térmico (con recargas del 80 % en 30 minutos), sino que además tiene acceso sin restricciones al centro de grandes ciudades, como Londres, París o Madrid.
Que sus prestaciones deportivas no te engañen, son un añadido para llamar la atención del público además de un guiño al exclusivo y raro Porsche B32 (un Volkswagen T3 con motor Porsche). El I.D. BUZZ gracias a su condición de eléctrico haría un excelente taxi/Über en las ciudades con restricciones de acceso, justo como también lo fueron en su día el T1 y el T2.
Obviamente, el I.D. BUZZ equipa tecnología para una conducción autónoma. Normalmente, si lees Motorpasión es porque te gusta conducir, pero si te vas de acampada o de finde con los amigos en el I.D. BUZZ ¿realmente quieres estar conduciendo por la autopista mientras tus amigos están de risas detrás? De todos modos, en caso de tener que llevar a la suegra en un viaje familiar, siempre puedes conducir y evitar así tener que hablarle.
Volkswagen quiere vender en 2025 un millón de vehículos eléctricos, con el primer coche de la familia I.D. llegando al mercado en 2020 (sería un compacto derivado del I.D. visto en el Salón de París de 2016). Volkswagen confirmó también que la gama se iría completando con un SUV, pero no ha dicho nada acerca del I.D. BUZZ. Aunque, como hemos visto, el I.D. BUZZ tiene mucho sentido en el mercado. Y si Volkswagen se decide a lanzarlo al mercado por 2025, cuando las infraestructuras de recarga hayan mejorado -esperemos-, sería el renacimiento del clásico Kombi (o T1 o Bulli) con el que tantas veces nos ha tanteado Volkswagen.
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