Borgward Isabella Concept: una mirada al pasado para observar un futuro que pinta prometedor
El Borgward Isabella Concept es uno de esos coches conceptuales que te hacen desempolvar las páginas de la historia del Automóvil. Se trata de una reinterpretación del clásico Borgward Isabella, el modelo más representativo de Borgward desde su presentación, en 1954, hasta el cese de actividad de la firma de Bremen, en 1961.
Ahora, en el Salón de Frankfurt, Borgward quiere recordar al mundo que resucitó en 2008. Desde Alemania abrió mercado en China para, ahora, comenzar su desembarco en Europa por la puerta de su país natal. Con la ayuda de sus modelos BX5, BX6 y BX7 buscarán ese objetivo, pero es con la ayuda del Borgward Isabella Concept que han sabido captar la atención en la cita bienal.
Longitud | Anchura | Altura |
---|---|---|
5,00 metros | 1,92 metros | 1,40 metros |
El Borgward Isabella Concept es un eléctrico de cuatro plazas que quiere ser el punto de partida de las líneas y la tecnología que empleará Borgward en sus futuros modelos. En cuanto a lenguaje de diseño, sus responsables hablan de la "impresión de flujo", buscando un "equilibrio perfecto" entre formas orgánicas redondeadas y líneas precisas", además de "sinergias estilísticas entre belleza y tecnología".
Un ejemplo de esto es la forma en la que las líneas fluidas conectan elementos tan funcionales como todos aquellos que tienen un sentido aerodinámico, siguiendo una de las máximas preocupaciones de los diseñadores del Borgward Isabella Concept. Bajo la piel, una cadena cinemática eléctrica y la conectividad digital son las enseñas bajo las que Borgward defiende su nuevo proyecto.
Un guiño al Borgward Isabella clásico
Borgward fue una firma alemana fundada en Bremen por Carl F. W. Borgward (1890 – 1963). Desde su constitución en 1929 hasta su cierre, en 1961, produjo automóviles para cuatro marcas comerciales: Borgward, Goliath, Hansa y Lloyd. Fue uno de los nietos del abuelo Borgward, Christian Borgward, quien junto a su socio, Karlheinz L. Knöss, y con la financiación de capital chino se encargó de reflotar la marca en 2008.
Mucho antes que eso, en 1954, veía la luz el Borgward Isabella, un modelo de 4,39 metros de longitud que contó con seis variantes de carrocería: sedán, coupé, cabriolet, cabriolet 2+2, familiar (conocido como Isabella Combi) y pick-up. Al inicio de la producción el motor de 1.493 cc que montaba desarrollaba 61 CV, aunque pronto la potencia aumentó hasta 76 CV para 1.010 kg de tara.
Inicialmente, el Borgward Isabella debería haberse conocido como Borgward Hansa 1500, pero sólo las primeras unidades salieron de la línea sin la denominación Isabella. Inspirado en la esposa de Borgward, Elisabeth, Isabella fue el nombre con el que el vehículo se popularizó entre el personal de la empresa cuando comenzaron a salir las unidades de prueba, y más adelante se hizo oficial.
Con 7.265 marcos como precio de salida (unos 17.500 euros en la actualidad), y frente al muy popular Mercedes-Benz 180 Ponton, el Borgward Isabella partía como un modelo más competitivo, aunque en Alemania quedara posicionado por encima de los modelos equivalentes de Opel y Ford.
Sólo en 1954 se vendieron 11.150 unidades del Borgward Isabella, lo que auguraba un brillante futuro para el modelo. Sin embargo, las primeras unidades presentaban algunos defectos de fabricación que se achacaron a un desarrollo apresurado, frente a la solidez que en Stuttgart ofrecía Mercedes-Benz.
Quizá por esa razón, el Isabella no cumplió las expectativas iniciales, y ya en los años siguientes a su lanzamiento los números fueron disminuyendo, a la vez que Borgward adaptaba la producción a las ventas reales.
En 1961 Borgward se declaró en quiebra. Para aquel entonces se habían producido un total de 202.862 unidades del Borgward Isabella, una cifra impresionante por aquella época, incluso comparándola con su competidor de la marca de la estrella, el Mercedes-Benz Ponton en sus diferentes versiones. Pese al final que tuvo Borgward, el Isabelle fue un modelo rentable para la firma.
La maquinaria correspondiente a la línea de producción de la empresa alemana fue trasladada a México, donde continuó en funcionamiento, aunque sin producir un solo Isabella. En Alemania, sólo un año más tarde, BMW lanzó el modelo 1500, con el que abrió la serie de los BMW Neue Klasse, con el fin de llenar el hueco comercial que dejó el Isabella.
De vuelta a América, en Argentina fue Dinborg, una filial local de Borgward, la que continuó la producción del Isabella entre 1960 y 1963, aunque nunca llegaron a producir más que 999 unidades. La época del Borgward Isabella había llegado a su fin. Y así fue hasta este 67º Salón de Frankfurt, celebrado en 2017.