Hace algo más de una semana un terrible suceso en el que una mujer de 49 años de edad perdía la vida tras ser atropellada por un coche autónomo de pruebas la compañía Uber en Tempe, Arizona, disparaba las discusiones sobre la conducción autónoma.
Tanto Uber como Toyota anunciaron la detención de sus programas de pruebas y ahora es el estado de Arizona, al suroeste de Estados Unidos, quien ha anunciado la suspensión de todas las pruebas de vehículos autónomos en sus carreteras, si bien la empresa ya había detenido dichas pruebas desde el momento del accidente.
El gobernador de Arizona, un estado que hasta el momento ha sido un lugar clave para el desarrollo de estas tecnologías de conducción pilotada, afirmaba ayer que se ha revocado la licencia de pruebas de vehículos autónomos en carretera abierta a Uber, lo cual supone un varapalo importante para la compañía de San Francisco, pero también para otros competidores como Waymo.
Y es que en torno a la mitad de la flota de 200 vehículos de pruebas de Uber, así como cientos de empleados, tenían hasta ahora su base en Arizona. Según escribía el gobernador del estado en una carta al CEO de Uber, Dara Khosrowshahi, el vídeo del accidente difundido por la policía es "perturbador y alarmante, y suscita muchas cuestiones sobre las posibilidades de que Uber mantenga sus pruebas en Arizona".
"En el mejor interés de la gente de mi estado, he instruido al Departamento de Transporte de Arizona que suspenda la posibilidad de que Uber pueda seguir con sus pruebas y operando vehículos autónomos en la vía de carreteras públicas de Arizona", comentaba el gobernador Doug Ducey, quien describía el accidente como "un fracaso incuestionable".
Radiografía del accidente
La policía aún sigue investigando el suceso -captado en vídeo- en el que Elaine Herzberg de 49 años perdía la vida tras ser atropellada por un Volvo XC90 de la flota de vehículos autónomos en prueba de Uber, mientras el vehículo conducía por sí mismo, de manera automatizada.
La mujer, andando y empujando su bicicleta, cruzaba de noche una vía de cuatro carriles apenas iluminada cuando el vehículo de Uber se le echó encima. La persona en el puesto del conductor del vehículo -que por razones de seguridad debía estar presente- no prestaba atención a la carretera en el momento del suceso.
Así pues, todo apunta a que ambas partes implicadas tuvieron parte de culpa, aunque como es obvio fue Herzberg quien tristemente se llevó la peor parte. "Una situación complicada", según la policía, cuyo desenlace conoceremos una vez la investigación concluya y sepamos realmente lo que pasó.