Tras el Gran Premio de España, Fernando Alonso puso rumbo a Estados Unidos donde dentro de dos semanas disputará las 500 Millas de Indianápolis. El español ya ha tenido oportunidad de volverse a subir a su McLaren Honda Andretti en los entrenamientos que están teniendo lugar esta semana en el óvalo de Indiana.
De hecho, el bicampeón del mundo de Fórmula 1 fue el más rápido de las dos primeras horas de test dedicadas a los rookies y a los pilotos que no disputan la temporada completa de la Indycar en el día de allí. Allí se vio las caras con el otro español, Oriol Serviá, que fue segundo de ésta primera parte de la sesión, y que dejó un doblete muy aplaudido por los aficionados.
Otros pilotos con mayor experiencia como Juan Pablo Montoya -que este año no disputa la temporada completa y está obligado a refrescar su memoria en esta primera parte- tan solo dieron unas pocas vueltas y se reservaron para los test colectivos en los que ya, Fernando Alonso terminó en decimonovena posición. Más o menos en la mitad de la tabla.
El piloto de Mclaren Honda pudo por fin rodar con el resto de sus rivales e incluso comenzar a adelantar, uno de los asuntos que aún tenía pendientes el español. Por lo que se pudo ver en la retransmisión en directo que la organización hace vía Youtube, Alonso se manejó bastante bien para ser un novato.
Aún dispone de varios días más de entrenamientos en los que podrá seguir progresando y aprendiendo cómo funciona la categoría. No obstante, el sábado, tendrá que enfrentarse a la clasificación que, aunque en esta categoría la posición de salida no es determinante, seguro que nos puede dar una pista de lo que se puede esperar del asturiano en la siempre imprevisible Indy500.