El Mercedes ESF Concept es el primer prototipo para mostrar avances en seguridad que la marca realiza en 35 años, desde 1974.
Presenta muchas tecnologías que podremos ver en un futuro en el Mercedes Clase S, y a partir de ahí seguro que muchas marcas las adoptan en categorías inferiores, como ya ocurrió con el cinturón de seguridad, el airbag o el ESP.
Por este motivo hemos creído interesante revisar uno por uno todos los detalles de unos sistemas de seguridad novedosos que probablemente formen parte de los coches de calle en los próximos años.
Estructuras de metal hinchables
Mercedes explica este sistema con la analogía de una cama hinchable: ocupa poco cuando está sin aire y es muy mullida cuando tiene aire. Se trata de unas láminas de metal que, en caso de colisión, se rellenan de aire con un mecanismo similar al del airbag.
Esto crea una protección extra en caso de impacto lateral. Como se ve en la foto, cuando estas estructuras están rellenas de aire sobresalen de la puerta, dejando a ésta abombada.
La ventaja que aporta este sistema respecto a las barras de protección lateral clásicas es permitir una protección lateral grande que no podría encajarse en la puerta de forma fija sin hacerla mucho más grande.
Braking Bag: el “airbag” para frenar
Los coches actuales sólo utilizan las ruedas para frenar, aunque se podría hacer más. En 1952 un Mercedes-Benz SL de competición que participaba en Le Mans ya tenía un curioso sistema de freno por aire: podía elevar su techo para crear más resistencia y frenar antes, como si se tratase de un alerón de avión.
Otra forma es la que han incorporado con el braking bag (bolsa de frenado). Se trata de un sistema similar al airbag, que llena una resistente bolsa de aire situada debajo del motor, entre las ruedas delanteras, la zona que más peso del coche recibe durante una frenada de emergencia. Este sistema aumenta la deceleración en 20 metros/segundo2.
Con este sistema, el frontal del coche se eleva hasta 8 centímetros, compensando así el efecto de que la parte delantera se clave en el asfalto por la transferencia de pesos en la frenada. Mercedes asegura que este sistema mejora la “compatibilidad geométrica” con el otro coche, aunque habría que comprobar si esto no puede ser peligroso para los ocupantes del otro coche.
En todo caso, Mercedes afirma que aún tardará tiempo en llegar a producción, nos imaginamos que todavía es un sistema que requiere mucha más investigación y desarrollo.
Interactive Vehicle Communication: comunicación automática entre coches
Es un tema del que se lleva hablando mucho tiempo: compartir la información que recoge el coche. Un banco de niebla, una placa de hielo, esquivar un coche bruscamente, etc. son varios incidentes que un coche puede registrar en mayor o menor medida.
La idea es compartir esta información de forma automática con los coches que vienen en sentido contrario. Además de avisar sobre incidentes (ej. hay hielo en el próximo kilómetro, o hay un coche de bomberos en las inmediaciones con luces de emergencia), se podrían realizar acciones más complejas como optimizar el tráfico.
Por ejemplo, si un coche varios km más adelante nos dice que hay atasco, el coche nos podría recomendar la velocidad óptima para no tener que parar ni tardar más (¿cuántas veces circulamos por autopista a 120 km/h para llegar a un atasco?)
Estos sistemas se están probando en el proyecto “Safe Intelligent Mobility – Test area Germany” (simTD), en el área de Fráncfort, con la colaboración del Gobierno alemán.
Continuará...
En Motorpasión | Mercedes-Benz ESF Concept: el primer airbag que frena contra el suelo
, *Mercedes ESF Concept: Parte 2, Parte 3