Lexus continúa a toda marcha con su estrategia de electrificación y, tras lanzar el SUV RZ, marca como siguiente estación el segmento de los deportivos eléctricos con un futuro modelo que pretende seguir la estela del mítico LFA.
Como anticipo la firma japonesa presentará su prototipo Electrified Sport en el próximo Goodwood Festival of Speed, que comenzará el 23 de junio. Este concept car, que ya llamó nuestra atención en diciembre durante la revelación de los planes eléctricos de Toyota, promete unir en un mismo coche una fulgurante aceleración y una autonomía cercana a los 700 km.
Con todos los 'ingredientes secretos'
Sirviéndose de este símil cocinero, Lexus nos adelanta que el modelo de producción que surja a partir del Electrified Sport contará con todo aquello que hizo memorable al LFA. Salvo, claro está, el estremecedor sonido de aquel motor traído directamente de la F1.
Pero lo que sí parece seguro es que este futuro deportivo eléctrico será tan apasionante de conducir como su antecesor espiritual. Desde la firma reiteran que están trabajando para lograr una experiencia estimulante y adictiva en todas las fases de la conducción, tanto en la toma de curvas como en el frenado o la aceleración.
Aceleración que ya nos tiene acostumbrados a cifras mareantes en los coches eléctricos, pero que en el caso del Electrified Sport adquiere dimensiones de ciencia ficción: desde Lexus barajan que debería ser capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en unos dos segundos.
Para alcanzar estas prestaciones sin alterar el equilibrio del coche se recurre a la última tecnología, donde las baterías juegan un papel fundamental. Aquí Lexus prevé alcanzar una autonomía aproximada de 700 km, para lo cual espera poder dotar al modelo de producción con baterías de estado sólido.
De momento, las imágenes difundidas por la marca sugieren que el prototipo es perfectamente funcional a día de hoy. Su estética, curiosamente, prescinde de las aristas habituales en sus SUV y opta por una estilizada silueta que recuerda al instante a los coches del campeonato Super GT japonés.
A esto último contribuyen detalles como los cierres del capó, los labios aerodinámicos de los paragolpes o la toma de carga, situada en el pilar posterior izquierdo cerca del techo.
Así las cosas, Lexus comienza a enseñar sus cartas en un juego que la enfrentará a sus rivales de siempre (como Porsche) y a otros nuevos, como el futuro Tesla Roadster. Tocará esperar para ver si este giro hacia la deportividad (impulsado por el propio CEO de Toyota, Akio Toyoda) produce los frutos que buscan, pero de momento la cosa no pinta mal.