El impuesto sobre hidrocarburos se encarece 2,9 céntimos por litro, que afecta tanto a gasolina como a gasóleo, el GLP se libra pues su fiscalidad está congelada 10 años. La subida impositiva y la progresiva recuperación del barril de petróleo situa la gasolina a una media de 1 euro/litro y el gasóleo a 0,90 euros/litro.
Esta subida afecta a los combustibles de uso no profesional, es decir, a los particulares. Volvemos al nivel de precios de octubre del año pasado, y la previsión es que siga subiendo. De momento el gasóleo seguirá más barato que la gasolina, aunque como vimos el año pasado, esta tendencia puede verse invertida. El precio del barril está ahora por los 71 dólares, llegó a casi 150 dólares el año pasado.
Vía | El Mundo
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