Extremadura ha recibido 'in extremis' la confirmación para activar (quizá la solicitud viajaba en tren) el programa de ayudas a la compra de coches eléctricos y de energías alternativas MOVES. El plan tiene una dotación a nivel estatal de 45 millones de euros, los cuales han sido desembolsados ya en su totalidad a las Comunidades Autónomas que lo han solicitado, por lo que está cerrado.
A Extremadura le corresponden un poco más de un millón de euros, ya que los fondos se entregan en función de la población y su concesión es directa, con un plazo de presentación que expira el 31 de diciembre (o hasta que se agoten los fondos).
Un presupuesto de 1.043.465 euros
Las ayudas están destinadas tanto a la compra de vehículos de energías alternativas (con un presupuesto de 521.732 euros) como a la instalación de puntos de recarga rápida y ultra rápida de coches eléctricos (469.559 euros) y a la implantación de sistemas de préstamos de bicicletas (52.173 euros).
Estas ayudas contemplan la adquisición de vehículos de GLP, Autogás o bifuel, GNC, GNL, pila de combustible de hidrógeno, híbridos e híbridos enchufables y eléctricos u están dirigidas a autónomos, particulares, comunidades de propietarios y organismos públicos.
Como podemos ver, las ayudas a la compra de turismos se sitúan en los 5.000 euros, 15.000 euros para camiones y autobuses y 700 para motos eléctricas.
En el Diario Oficial de Extremadura puedes consultar todos los detalles y requisitos de esta convocatoria así como la documentación necesaria.
Recordamos que uno de los principales requisitos para optar a las ayudas para la compra de vehículos es el achatarramiento de un vehículo de categoría M1 (turismos) de más de 10 años o de un vehículo N1 (furgonetas o camiones ligeros) de más de siete años.
Según la información del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), que gestiona las ayudas, un total de 18 comunidades han activado el plan y ya ha desembolsado en su totalidad a las Comunidades Autónomas las ayudas del Plan MOVES
Un programa que por otro lado ha sido criticado recientemente por la asociación de fabricantes ANFAC por su carácter "insuficiente y desigual" y considera que para que el coche eléctrico tenga sentido en España es necesario que, "desde el sector y el futuro Gobierno, se trabaje en una regulación y política que garantice la certidumbre y la cohesión territorial".
Mientras tanto el Gobierno en funciones se ha marcado el ambicioso objetivo de que para 2030 haya cinco millones de coches eléctricos en España.
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