Ante la crisis sanitaria del coronavirus, el Ayuntamiento de Barcelona ha puesto en marcha una serie de medidas en el ámbito fiscal y que también afectan a la movilidad. Y entre ellas se destaca el retraso de la entrada en vigor de las multas por acceder a la Zona de Bajas Emisiones (ZBE), cuya activación estaba prevista para el 1 de abril.
De igual manera, la alcaldía ha suprimido las sanciones por aparcar indebidamente en las zonas de estacionamiento regulado, eliminando por tanto el pago en la mismas. Una medida que también ha tomado el Ayuntamiento de Madrid.
Asimismo, y como ha ocurrido en la capital de España, el servicio de Bicing de Barcelona ha quedado totalmente suspendido desde ayer, se han tomado medidas para facilitar la carga y descarga de cara a los transportitas y se ha reforzado el servicio de transporte público en hora punta para evitar aglomeraciones, así como las líneas de metro (L1 y L5) que ayer experimentaron grandes concentraciones de gente.
🅿️🚘🏍️Reformulamos la fiscalidad relacionada con la movilidad en la ciudad. pic.twitter.com/GOXsG6uGmS
— Ajuntament de BCN (@bcn_ajuntament) March 16, 2020
Con la adopción de estas medidas Barcelona quiere facilitar la movilidad mientras dure la epidemia, aunque también ha recordado a los ciudadanos que deben acatar las medidas de limitación de desplazamientos exigidas en el Real Decreto 463/2020, en las que se restringe su movilidad excepto para ir al trabajo, acudir a centros sanitarios o para comprar productos de primera necesidad.
Habrá nueva fecha una vez finalice el estado de alarma
Según ha comunicado el consistorio, el aplazamiento de las multas se ha adoptado consensuadamente por todos los actores implicados a fin de "no afectar a la movilidad de las personas en la situación excepcional actual".
Hay que recordar que la ZBE, que entró en funcionamiento el 1 de enero, restringe la circulación de coches y motocicletas sin etiqueta en toda la ciudad de Barcelona (excepto la Zona Franca-Industrial y el barrio de Vallvidrera, el Tibidabo i les Planes) así como en el municipio de L’Hospitalet de Llobregat y partes de los municipios limítrofes a las rondas: Esplugues de Llobregat, Cornellà de Llobregat y Sant Adrià de Besòs.
Así, el área de aplicación es mucho mayor que la de Madrid Central, que sólo comprende en distrito centro de la ciudad, aunque en el caso de la ZBE se limita el acceso a la zona sólo de lunes a viernes y entre las 7:00 y las 20:00 horas. No obstante, hay que tener en cuenta que no incluye a los residentes entre las excepciones, lo que podría suponer una limitación extra para los ciudadanos en caso de emergencia.
Al igual que ocurrió en Madrid Central, la ZBE instauró un plazo de adaptación para los ciudadanos, con un periodo informativo que terminaba el 1 de abril. Ahora la fecha ha quedado aplazada, por lo que no se sancionará a partir de entonces a aquellos conductores que accedan con automóviles o motocicletas sin distintivo medioambiental.
El Ayuntamiento adelanta que la puesta en marcha del régimen sancionador "se evaluará posteriormente en función de la evolución de la situación" y que una vez cese el estado de alarma, "las administraciones implicadas analizarán la situación y determinarán una nueva fecha" para la activación de las multas.
Zonas de aparcamiento regulado gratuitas y suspendido el servicio de bicicletas municipales
En paralelo, el consistorio de la Ciudad Condal ha activado otra batería de medidas en materia de movilidad, como la congelación de las sanciones por aparcar en las zonas de estacionamiento regulado, donde no se multará por estacionar sin pagar. El objetivo de esta disposición es facilitar el acceso a los trabajadores de servicios esenciales, así como para atender necesidades médicas.
Asimismo, también se han tomado medidas para facilitar la carga y descarga para favorecer el suministro de alimentos y otros bienes de primera necesidad y se han eliminado las limitaciones por tonelaje en los vehículos.
Una resolución que viene de la mano de las medidas decretadas por el Estado y el gobierno autonómico catalán y que afectan a los transportistas a nivel general. Entre las mismas se destaca la de la excepción de cumplir con los descansos estipulados cuando presten servicio en las zonas de riesgo.
Por último, también se ha optado por suspender el servicio municipal de bicicletas Bicing desde las 15:00 horas de ayer lunes 16 de marzo. Una decisión que también se ha tomado en Madrid y que como en la capital española responde a las indicaciones de las autoridades sanitarias.
Medidas contradictorias
Así, las dos principales ciudades de España comienzan a replicar medidas similares ante esta crisis sanitaria, aunque han contando con voces en contra por parte de los ciudadanos o incluso de otras administraciones.
Por ejemplo, eliminar el régimen general de zonas de aparcamiento regulado, podría traer consigo el efecto contrario pese a las restricciones de movilidad: mayor número de coches circulando y posible colapso de las plazas de aparcamiento de superficie. Así lo considera Oscar Puente, alcalde de Valladolid, que ha confirmado en Twitter que las zonas reguladas seguirán activas en esta ciudad.
2.- Si suprimimos la ORA eliminamos la rotación. Si la necesidad de que haya espacios disponibles habitualmente está clara, más aún en las actuales circunstancias, en las que quienes necesitan aparcamiento están incursos en los casos que contempla el decreto de alarma.
— Oscar Puente (@oscarpuente) March 15, 2020
Por otro lado, varios ciudadanos de Madrid se han mostrado contrarios a la suspensión del servicio de BiciMAD pues lo consideran mejor alternativa que el transporte público, al ser individual y no de tipo colectivo.
Y es que precisamente ambos consistorios han eliminado trabas a la circulación del vehículo privado para evitar aglomeraciones en el metro y autobuses municipales.
Sea como fuere hay que señalar que no es lo mismo el vehículo propio que un servicio de uso compartido como es el de las bicicletas municipales y que requiere medidas extra de limpieza de complicada coordinación.
Aunque bien es cierto que las situaciones de aglomeración que se están dando desde ayer en algunas líneas de transporte público tanto en Madrid como en Barcelona no permiten cumplir con las medidas de distanciamiento exigidas por las autoridades sanitarias.
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