Un tren subterráneo de alta velocidad para aumentar la natalidad es el plan de Corea del Sur para que su población no quede reducida a la mitad en 75 años. Algo que ocurrirá si este país continúa con el ritmo actual de nacimientos: el más bajo del planeta.
La solución a este problema trenes mediante puede parecer bastante loca, pero en realidad tiene bastante sentido. Y se podría extrapolar a otras grandes ciudades del mundo.
92.000 millones de euros en seis líneas de metro ultrarrápido desde la capital a la periferia
Residir en una gran ciudad puede suponer varias trabas para la vida diaria. La vivienda es cara, así que se tiende a comprar o alquilar casa en poblaciones de la periferia. Esto a su vez se traduce en invertir varias horas al día entre ir y volver de trabajo. La vida se pasa entre el trabajo y el trayecto.
En Seúl, capital de Corea del Sur y con más de nueve millones de habitantes, es especialmente flagrante. Allí la vivienda se ha encarecido casi un 50 % en los últimos años, superando con creces los ingresos anuales de un hogar medio. En ciudades dormitorio como Dongtan es más barato, pero si se trabaja en Seúl supone unas dos horas y media de ida y vuelta si se opta por hacerlo el autobús.
"Con un viaje de dos horas de camino a casa ¿cómo puede alguien dedicar tiempo a un bebé? La idea es dar a la gente más tiempo libre después del trabajo", explica Park Sang-woo, ministro de Transportes en este país asiático. Este argumento ha protagonizado la presentación el nuevo tramo de tren de alta velocidad que conecta Saul con esta Dongtan.
De 80 minutos a 19 minutos por trayecto. Se trata de uno de los seis tramos proyectados del Great Train eXpress (GTX). Se inauguró el pasado viernes y comenzó a funcionar el sábado. Estas seis líneas subterráneas de alta velocidad están presupuestadas en 134 billones de wones (unos 92.000 millones de euros al cambio actual) y se espera todas estén listas en 2035.
Su principal ventaja, que reducirán el tiempo de los trayectos diarios: en el que va a Dongtan son unos 19 minutos en comparación a los 80 minutos que supone hacerlo en autobús. Y esto, defiende Park Sang-woo, mejorará la conciliación y ayudará a impulsar los nacimientos porque "permitirá a la gente pasar más tiempo con su familia por la mañana y por la noche".
Estos trenes subterráneos, cuando están a pleno funcionamiento, serán de los metros más rápidos del mundo: anuncian que serán capaces de viajar hasta 180 km/h.
Una tasa de natalidad bajísima. El Ejecutivo surcoreano lleva tiempo buscando incentivar la natalidad a base de subsidios, pero con poco éxito. No en vano, con los últimos datos publicados, se han convertido en el país con la tasa de natalidad más baja del mundo. En 2023 los recién nacidos se fijaron en 230.000, que son 19.200 menos respecto al año anterior.
La tasa de natalidad en este país asiático se fijó el año pasado en 0,72, cuando la estimada para que la población se mantenga estable es de 2,1. Por poner la cifra en contexto, en 2023 en España se registraron poco más de 322.000, bastante más que en Corea del Sur y no siendo nuestra natalidad un ejemplo.
South Korea has the World's lowest fertility rate pic.twitter.com/HCFtJdZfUV
— Yasir Mahmood (@MofaYasir) March 1, 2024
Si en la ecuación sumamos que Seúl es una de las ciudades con peor relación entre la calidad y precio del m², no estamos ante el mejor escenario para embarcarse en tener un hijo.
De hecho el movimiento del Gobierno no es un canto al sol: los jóvenes de Seúl señalan habitualmente los largos trayectos que tienen hacer para ir al trabajo desde su casa en la periferia, y el precio de la vivienda, como los principales motivos para no formar una familia. Los números dirán en la próxima década si estos nuevos trenes impulsan los nacimientos.