Nigel Mansell, a sus 52 años, tiene que perder unos tres kilos de peso de aquí a marzo, así como conseguir el tono y fondo físicos que necesita para dominar estos monoplazas en unas pruebas que prometen “sorprender a alguna gente”, según el inglés. “Estos coches son difíciles de conducir y realmente tienes que trabajar duro con ellos, me recuerdan a los coches de GP de los últimos años 80, o principios de los 90”. Y eso lo dice un Mansell al que recordamos desvaneciéndose en el podium tras una carrera agotadora, con aquéllos monstruitos. Estaremos atentos.
Vía | itv-f1