El coche más potente de esta curiosa marca ya es una realidad. Es el Zolfe Orange GTC4 y supone una opción para aquellos que quieran un coche de altas prestaciones por poco menos de 47.000 euros. Su reducido peso es una de sus principales bazas.
Pero no es sólo su ligereza. Un motor Ford Duratec 2.3 de 285 CV hace el resto. Si mezclamos sus escasos 700 kg de peso con esta potencia y par (284 Nm), nos da unas cifras a tener en cuenta, ya que acelera de 0 a 100 km/h en apenas 3,8 segundos y alcanza una velocidad máxima de 260 km/h.
Sus entrañas también hay que tenerlas en cuenta, puesto que el chasis es obra de Jez Coates, director técnico de Caterham. Por si fuera poco todo esto, su diseño es más que atractivo, rememorando a los clásicos como pueden ser el Datsun 240Z o el Opel GT clásico.
Una última vuelta de tuerca. Los ingenieros ya están trabajando en meter bajo el capó un motor V8 LS7 de 505 CV. Si, el motor del Chevrolet Corvette Z06. Demencial, pero atractivo igualmente.
Vía | Serious Wheels
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