Seat continúa con su ritmo frenético: desde marzo han presentado el Bocanegra Concept, el Ibiza, la versión SC y ahora el Seat Ibiza Cupra, que se podrá ver por primera vez en el Salón de París en octubre.
Su motor será un 1.4 TSI biturbo de 180 cv, y llevará una caja de cambios DSG de siete velocidades con levas en volante. No se han publicado detalles sobre su rendimiento, consumos o equipamiento completo, ni tampoco fotografías del interior.
Lo que sí sabemos es que el Seat Ibiza Cupra traerá unas llantas de 17 pulgadas, un chasis Agil deportivo, un kit de carrocería con paragolpes más anchos que le dan un aspecto más bruto, y en la trasera un difusor y un escape central con una forma asimétrica poco habitual.
Primeras impresiones
A bote pronto, la sensación que transmite es que Seat no ha querido radicalizar el Cupra, haciéndolo deportivo pero no en exceso en el aspecto estético.
El frontal, con una parrilla central muy ancha que deja los dos paneles de nido de abeja laterales casi reducidos a una pequeña línea, probablemente se haya hecho así para que el coche parezca más ancho y con más aplomo, sin embargo no acaba de convencer estéticamente en un primer momento. Si nos dicen que esta es la versión FR, nos lo creeríamos.
En su favor hay que decir que el Seat Ibiza lleva muy poco tiempo en el mercado como para que nos empecemos a acostumbrar a su versión más deportiva. ¿Será esta? Posiblemente no, le quedan muchos años por delante y no sería extraño ver un Seat Ibiza Cupra R, más potente y radical.
Pero todavía nos falta conocer el Seat Ibiza FR. Teniendo en cuenta los calendarios de Seat, probablemente podamos verlo en marzo del próximo año en Ginebra. Quizás con la aparición de éste consigamos asimilar el nuevo lenguaje visual del Ibiza.
Fuente | Seat