Entre las muchas compañías británicas dedicadas a la fabricacion de automóviles de forma artesanal, quizá Jensen no sea de las más reconocidas, pero sin duda su modelo estrella, el Jensen Interceptor, es un icono para los amantes de los coches deportivos clásicos, aunque cabe comentar que apareció en nuestra lista de coches más feos de todos los tiempos, en Respuestas. De diseño originariamente italiano (Carrozzeria Touring se encargó de su estética), aunque luego la marca lo modificaría, destaca principalmente por su gran luneta trasera.
El Interceptor se fabricó entre los años 1966 y 1976, momento en el que su producción se vió interrumpida. Desde entonces, ha habido algunos intentos de revivirlo pero han sido los nuevos dueños de Jensen International Automotive los que lo han hecho. Comenzaron en 2010, creando el Jenson Interceptor S, y ahora presentan su nueva apuesta, el Interceptor R que verá la luz a finales de año. ¿Lo más curioso? Cada “nuevo” coche estará creado sobre la base de una unidad del original (convenientemente restaurada y rediseñada para acoger la tecnología moderna).
Como buena secuela, sigue montando motor americano (el original montó al principio un 6.3 litros de origen Chrysler y más tarde aumentaron la cilindrada a 7.2 litros). El nuevo Jensen Interceptor esconde bajo el capó el V8 de 6.2 litros (LS3) del Chevrolet Corvette, que desarrolla en este caso 435 CV y se combina con una caja automática de cuatro velocidades o una manual de seis. El británico despacha el sprint de 0 a 100 km/h en apenas 4,5 segundos.
El Jensen Interceptor 2011, con nuevo motor, escape, suspensión y sistema de frenos, será presentado de forma oficial en el evento Salon Prive que se celebrará en el Reino Unido durante el mes de junio. El precio de cada unidad, cerca de 120.000 euros, se debe a los cinco meses de trabajo artesanal que lleva su producción (o más bien su restauración, aunque el coche está completamente rediseñado en cuanto a ingeniería).
Vía | GT Spirit