Desde que dejaron de existir las versiones WRX y WRX STi del Subaru Impreza, el compacto japonés no ha vuelto a ser lo mismo. Ya no es el objeto de deseo de cualquier petrolhead, pero todavía es un modelo de vital importancia para Subaru.
Aunque en Europa tiene más popularidad el XV, el Impreza sigue siendo una pieza clave para la marca en ciertos mercados, especialmente en Estados Unidos. Por eso se ha renovado por completo y el escenario escogido para dar a conocer su sexta generación ha sido el Salón del Automóvil de Los Ángeles.
Primero llegará a Estados Unidos, luego a Europa
Hace tiempo que el Subaru Impreza dejó de ser un compacto con versiones muy picantes, además de una autoridad en el mundo de los rallyes, para convertirse en un discreto hatcback del segmento C más orientado a la eficiencia y la practicidad que a la deportividad.
El cambio de planteamiento llegó en 2018 con su quinta generación, que sigue a la venta con un solo motor, un 2.0 híbrido de 150 CV con etiqueta ECO, automático y, por supuesto, con tracción total, como todos los Subaru.
Está claro que el Impreza ya no es lo que era, pero sigue teniendo mucha fuerza en ciertos territorios, por lo que Subaru no se olvida de él y acaba de renovarlo por completo.
Se trata de su sexta entrega y la marca habla de Impreza 2024, así que todavía tardará en llegar a Europa, si bien aterrizará en Estados Unidos a lo largo de la próxima primavera.
Aunque estamos ante un nuevo modelo, parece una evolución del anterior Impreza. Tanto es así que se asienta sobre la misma plataforma, la denominada Subaru Global Platform, y mide exactamente lo mismo: 4,47 metros de largo. También seguirá disponible únicamente con carrocería de cinco puertas.
Por dentro, su diseño también recuerda al del modelo actual y ni siquiera cambia la instrumentación analógica por un cuadro digital, aunque la pantalla táctil central de 8 pulgadas del quinto Impreza deja sitio a una de 11,6 pulgadas dispuesta de forma vertical
También tiene un nuevo sistema de infoentretenimiento compatible con Apple CarPlay y Android Auto sin cables. A la dotación tecnológica se suma la última versión del paquete de asistencia a la conducción EyeSight.
En cuanto a las mecánicas, solo se ha perfilado la gama de motores con la que llegará el Impreza a Estados Unidos. Lo hará con gasolina 2.0 de cuatro cilindros bóxer que desarrolla 154 CV y con un bóxer 2.5, también de cuatro cilindros y gasolina, que entrega 184 CV.
Ninguno de los dos está electrificado y solo podrán asociarse a una caja de cambios automática de tipo CVT y a la tracción total simétrica permanente de Subaru.
El más potente solo estará disponible con el nuevo acabado RS, que regresa a Estados Unidos 25 años después. En 1998, el Impreza RS fue el precursor del Impreza WRX en el mercado americano y luego desapareció.
Ahora renace para ser la alternativa más prestacional del compacto japonés, aunque sus 184 CV no serán suficiente para ocupar el hueco del extinto Impreza WRX y todavía menos del Impreza WRX STi. Pero para eso existe el Subaru WRX de 275 CV, aunque no se pueda disfrutar a este lado del charco.
Al menos, el nuevo RS tendrá un aspecto más deportivo que el Impreza de 154 CV, tanto por fuera como por dentro, además de heredar la dirección del WRX para mejorar su comportamiento dinámico. Hay que esperar para saber si esta versión RS llega a nuestro mercado y, en caso de hacerlo, con qué motor.
Y es que, a priori, el Impreza no podrá aterrizar en Europa con estas mecánicas. Habrá que esperar para ver si mantiene el sistema híbrido de 2.0 litros y 150 CV o adopta una alternativa de mayor potencia para plantar cara al renovado Toyota Corolla Electric Hybrid, que se ofrece con dos conjuntos híbridos, de 140 y 195 CV.