Esta marca seguramente sea desconocida para vosotros. Proton es de origen malayo y no exporta al mercado español, pero sus modelos se venden en otros países europeos. En el Reino Unido uno de sus modelos está experimentando un gran crecimiento en ventas, un 375% en un sólo mes.
Se trata del Proton GEN-2 ecoLogic, el único modelo a día de hoy que se vende en aquel mercado con capacidad para funcionar con GLP sin ningún coste para el comprador, es decir, que la versión de gasolina cuesta exactamente lo mismo. En otras palabras, sus dueños ahorran en combustible desde el primer kilómetro y durante toda la vida útil del coche.
Sólo hay una motorización, un 1.6 atmosférico de 110 CV, con transmisión manual o automática. Es difícil de juzgar sólo viendo fotos, pero tiene toda la pinta de ser un coche asiático al uso, un poquito por debajo de lo que ofrece un coche europeo similar. Su precio se mueve entre 9.995 libras (11.862,90 euros) y 11.795 libras (~14.000 euros), baratito.
En el mercado español, que yo sepa, cualquier modelo que funciona con GLP tiene que pagar una transformación, ningún fabricante se atreve aún a venderlos a igualdad de precio que sus equivalentes en gasolina. En Reino Unido hoy el GLP cuesta de media 52 peniques (0,52 libras) y la gasolina de 95 octanos cuesta 1 libra y 3,2 peniques, casi el doble.
Costando lo mismo, no hay plazos de amortización de un combustible a otro. El coste de mover el coche se reduce un 40% respecto a usar sólo gasolina, aunque puede funcionar con ambos combustibles. En aquel país es mucho más fácil repostar GLP, hay 1.400 estaciones de servicio, mientras en España no hay ni 40. En ese plan ¿qué sentido tiene comprar una versión gasolina? Ya ninguno.
Si en nuestro país un fabricante tuviese el valor de vender directamente coches transformados sin coste para el cliente (se puede amortiguar mucho la diferencia a golpe de subvenciones del IDAE, todo sea dicho), en aquellas ciudades donde fuese fácil repostar GLP iban a venderse como rosquillas.
Con un tacto de motor más agradable frente a gasolina y diesel, una autonomía muy grande con ambos depósitos, una contaminación claramente inferior, menor coste por kilómetro, más fiabilidad mecánica… hasta las petroleras se pondrían las pilas para vender más. Cuanto más suba la gasolina, más claro va a ser el ahorro.
El verano pasado, cuando el barril de petróleo alcanzó su máximo histórico, el GLP no subió de precio de la misma forma, pues no pasó de 58 peniques/litro. Entre que su carga fiscal es menor y que es mucho menos sensible a fluctuaciones como le pasa al petróleo en sí, es otro motivo más para pasarse al lado gaseoso. Pero habrá que seguir esperando…
Lanzo una pregunta al aire… ¿Cuántos de los presentes os decantaríais por una versión GLP si el precio fuese el mismo que la versión convencional?
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