El Isetta, ese coche curioso, entrañable y simpático con forma de huevo y una única puerta delantera situada en el frontal que, para poder acceder al habitáculo, obliga a dislocar la columna de la dirección. Parece que este modelo no es sólo querido por los amantes de los clásicos, sino que está en el punto de mira como futuro coche eléctrico, al menos como prototipo.
Ya conocíamos el eSetta, una visión moderna de lo que podría ser un Isetta actual y eléctrico. Más real es el Durax D-Face, que se presentó hace ya tres años en el Salón de Tokyo en forma de prototipo que se podía ver y tocar. Ahora son los suizos de Micro Mobility Systems AG los que presentan un vehículo eléctrico inspirado por completo en el Isetta.
Se presentó en el Salón de Ginebra y se caracteriza por su diseño en forma de burbuja y recrear muy fielmente las líneas del clásico Isetta. Bien es cierto que este eléctrico crece un poco en todas sus dimensiones, pero mantiene ese concepto micro característico del modelo original.
Tiene capacidad para dos ocupantes y con un motor de 15 kW es capaz de alcanzar 100 km/h de velocidad máxima. Su autonomía está cifrada en 100 kilómetros. No son cifras de récord, pero como vehículo urbano puede dar mucho juego, pensemos que estará exento de pagar en las zonas de estacionamiento regulado, se aparca en sitios muy pequeños y, en ciudad pura y dura, 100 kilómetros puede ser un día entero sin bajarse del coche.
Sí, tiene sus limitaciones y no se puede comparar con un smart (por ejemplo), pero ojo a su utilización como soporte publicitario, como coche de alquiler o, simplemente, para uso particular de aquellos que caigan rendidos ante su diseño único.
Su comercialización está prevista para 2018, con un precio estimado que arranca en unos 8.000 euros y sólo en el salón ya se formalizaron 500 reservas.