Piensa en un Opel deportivo. ¿Verdad que es fácil? La marca del rayo ha fabricado todo tipo de modelos de alto rendimiento a lo largo de su historia, desde el Opel GT hasta el Speedster, pasando por leyendas de la talla del Opel Kadett GSi o cualquiera de los Opel Astra OPC.
Sin embargo, con la muerte del departamento Opel Performance Center en 2018 y la desaparición de las siglas GSi del catálogo de la marca alemana, los deportivos del rayo dejaron de existir. Pero eso va a cambiar con la nueva gama GSe.
Una larga tradición de modelos de alto rendimiento
En los años 70, los Opel Commodore GS/E y Opel Monza GSE popularizaron estas tres siglas, cuyo significado en alemán es Grand Sport Einspritzung. Más tarde, cuando llegó el Opel Kadett más deportivo, Opel decidió internacionalizar el apellido traduciéndolo al inglés: Grand Sport Injection. De esa forma, nació la legendaria abreviatura GSi.
Unos cuantos años después, los de Russelsheim quisieron ir un paso más allá y ofrecer modelos más radicales. Para conseguirlo, fundaron el departamento Opel Performance Center en 1997 y enseguida crearon una nutrida familia de modelos OPC que presumían de ser todavía más rápidos que los GSi.
Pero todo cambió cuando Opel pasó a formar parte del Grupo Stellenatis. En cuestión de poco tiempo desaparecieron los OPC y poco después corrieron la misma suerte los GSi. El Opel Corsa GSi de la generación previa y las variantes GSi del actual Insignia fueron los últimos Opel deportivos que se fabricaron. Al menos hasta ahora.
Y es que Opel acaba de confirmar que está trabajando en una nueva gama deportiva. Para ser precisos, en una nueva “submarca de alto rendimiento” que se llamará GSe, aunque esta vez la ‘e’ tiene no significa ‘inyección’ en alemán, sino ‘Electric’. Sí, los nuevos Opel deportivos estarán electrificados.
Teniendo en cuenta los planes de Opel no queda otra. El fabricante germano ofrecerá una versión electrificada de cada modelo a la venta a partir de 2024 y solo comercializará vehículos 100% eléctricos a partir de 2028. La única opción de ver modelos deportivos con el logo del rayo, por lo tanto, es que estén electrificados.
El Opel Manta GSe ElektroMOD fue una declaración de intenciones cuando se presentó en mayo de 2021 y ahora se despejan todas las dudas. Así lo ha confirmado el CEO de Opel, Florian Huettl: “Estoy muy contento de anunciar el retorno de GSe como nuestra submarca deportiva de alta gama para un futuro inmediato. Una vez más nos hemos inspirado en nuestra valiosa herencia, al igual que sucedió con el aclamado nuevo diseño audaz y puro, y le hemos dado un toque moderno”.
Huettl también ha señalado que “En el futuro el distintivo GSe no sólo designará a los coches más dinámicos y divertidos de conducir, también significará “Grand Sport electric”, en consonancia con nuestros ambiciosos planes de convertirnos en una marca 100% eléctrica”.
De momento, no sabemos cuál será el modelo que estrene el resucitado apellido GSe, pero Opel ha asegurado que todos los coches de esta submarca contarán con una configuración de chasis “capaz de ofrecer un alto nivel de diversión y compromiso al volante”.
Otra de las premisas de los Opel GSe será la denominada garantía “a prueba de las Autobahn”, es decir, el compromiso de Opel de que sus vehículos se han probado de manera exhaustiva en los tramos sin límite de velocidad de las autopistas alemanas. El tercer pilar de los GSe es que ofrezcan “la opción de movilidad sin emisiones”.
De esta última frase se puede desprender que los Opel GSe no deberían ser estrictamente completamente eléctricos, puesto que los híbridos enchufables cumplen con el requisito de ofrecer la opción de moverse sin emisiones.
Además, ya hay propuestas del Grupo Stellantis con potentes mecánicas híbridas enchufables; sin ir más lejos, el Opel Grandland de 300 CV, pero también el DS 7 de 360 CV. ¿Quién dice que el Opel Astra se tenga que conformar solo con los 225 CV de su versión PHEV?