A estas alturas de la película todos conocemos el trabajo de Singer Vehicle Design, un especialista americano dedicado a restaurar Porsche 911 clásicos y convertirlos en auténticas bestias modernas con aspecto clásico (¡y qué aspecto!), aunque quizá el equivalente alemán de Singer sea todo un desconocido para la mayoría. Se llama Kaege Retro (una rama del preparador Kaege) y se dedican a lo mismo, precisamente.
Esta firma germana inició su andadura en 2010, tomando como base un Porsche 911 (993), con un diseño noventero poco interesante pero una auténtica obra de arte refrigerada por aire tras el eje posterior. La idea era cambiar su aspecto para hacerlo parecer un 911 de los setenta de la serie F -según ellos el más bonito de la historia-, a base de mucho trabajo y materiales como fibra de carbono, con lo que se consigue además reducir el peso del 993 original en unos 100 killogramos.
Las diferencias de tamaño y proporciones entre el 993 y el 911 clásico que querían conseguir supouso un gran reto, ya que durante semanas los especialistas de Kaege se dedicaron a estudiar cómo podían mantener las proporciones del serie F. Los faros delanteros, por ejemplo, se llaman Retro LED y son un desarrollo propio, que a pesar de su aspecto clásico tienen un bajo consumo. Todo se ha cuidado con gran detalle, incluídos los paragolpes, la tapa del depósito, las inserciones cromadas, etc...
Como no podía ser de otra forma, la firma alemana mantiene el motor original (993) seis cilindros bóxer de 3.6 litros y 300 CV, aunque convenientemente desmontado y revisado para garantizar su buen funcionamiento y suavidad. La transmisión original, manual de seis marchas, también está presente. Por último, es una gran ventaja el conector OBD, que permite un diagnóstico rápido del coche en cualquier concesionario Porsche.
Por supuesto, el cliente puede elegir entre una amplia paleta de colores de carrocería, en su mayoría de sabor añejo, aunque la decisión final es del comprador, que puede optar por lo que le venga en gana. Las llantas -en diseño Fuchs clásico-, los neumáticos, el sistema de escape o la suspensión KW, son completamente modernos, para una experiencia de conduccón realmente actual. Los frenos, por ejemplo, son los del 993 y no ha sido necesario modificarlos.
Lo mismo ocurre en el interior, ya que Kaege equipa asientos Recaro actuales pero con tapicería de cuadros al estilo retro, airbags, aire acondicionado, un sistema de radio y navegación Becker, volante forrado en cuero (quizá lo menos clásico de todo) o cuadro de instrumentos de aspecto setentero. No obstante, el cliente tiene la palabra final y puede pedir casi cualquier cosa que se le antoje.
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En Motorpasión | Theon y su espectacular Porsche 911 restomod
