Se puede llamar "Kombi", "Bulli", "Transporter" o simplemente “Microbús”, según la configuración en cuestión y la región de origen, pero la ya mítica Volkswagen Type 2 nació con los mismos principios que hicieron que el Beetle fuera tan exitoso: simplicidad, economía y practicidad llevados al formato furgoneta que tanto éxito tiene en la actualidad.
Este precioso ejemplar de T2 con chasis nº 861450 que ha sido restaurado por completo recientemente por los expertos de Napa Valley Restorations saldrá a subasta de la mano de RM Sotheby's y, aunque los expertos no han hecho ninguna estimación al respecto del precio final que podría alcanzar, es una verdadera belleza que por su condición sin duda estará muy cotizada.
Para hacernos una idea, una unidad similar de 1960 ya se vendió en 2017 por 207.200 dólares o lo que es lo mismo 183.465 euros al cambio.
Una preciosidad como recién salida del taller
¿Quién podría haber imaginado que un vehículo de trabajo como era el Microbús se acabaría convirtiendo en un icono indiscutible de la historia del automóvil? Uno que incluso décadas después de haber sido creado evoca sentimientos muy especiales a primera vista.
A cualquier joven de la época que le hubieran dicho que la T2 acabaría por convertirse en un objeto de colección, habría dicho "¡hay que ser más realista hombre!".
Lo irónico es que fue precisamente la practicidad de la Volkswagen T2 una de las bondades que impulsó a que se hiciera muy popular, se usasen mucho y se agotasen rápido.
Ya antes de su desaparición del mercado, las unidades que sobrevivieron a la época en la que los signos de la paz y el flower-power dominaban el mundo se consideraban raras y se volvieron muy buscadas por los coleccionistas modernos: no tardaron en ponerse de moda.
Una de las más codiciadas era la conocida como "Microbús Deluxe": con cuantas más ventanas, mejor. Cinco por lado, ocho claraboyas, el deseable parabrisas de pantalla dividida, una luna trasera gigante, así hasta “las 23 ventanas" que presenta esta furgoneta de 1962 con el atractivo techo corredizo "Samba".
Por su configuración y la disposición de la cabina esta T2 tiene un habitáculo interior tremendamente espacioso, y el motor de cuatro cilindros refrigerado por aire podía mantenerse en funcionamiento con un presupuesto mínimo y conocimientos básicos de mecánica.
Según han documentado los expertos de la casa de subastas que sacará esta increíble T2 a la venta en la primera semana de diciembre, su primer propietario fue un médico de Chicago.
Más tarde la adquirió un viajero que la usó para recorrer la parte oeste de los Estados Unidos en la década de 1970, y en 2004 pasó a ser propiedad de su sobrino, que la llevó de Colorado a Los Ángeles (California, EEUU) donde languideció en el olvido hasta que la compró el propietario actual en 2020.
Afortunadamente su último dueño puso esta Volkswagen T2 en manos de los expertos de Napa Valley Restorations (California, EEUU) para una restauración completa “sin límite de presupuesto”. Con una amplia experiencia en este tipo de vehículos clásicos, su trabajo en este ejemplar les ha llevado a obtener varios reconocimientos tanto en eventos como en concursos oficiales organizados por Volkswagen.
Según el restaurador, este trabajo minucioso de tan alto nivel se completó durante el transcurso de la pandemia de COVID-19 con piezas originales reacondicionadas o reemplazadas por otras hechas a medida, según fue necesario.
Acabada en su atractiva combinación de colores original “Sealing Wax Red” y “Silver Beige” con un interior en gris claro, este Microbus de 23 ventanas parece que acabe de salir del concesionario, pues está nuevo (si no mejor).
El portaequipajes de techo original cuidadosamente restaurado y la caja de herramientas y repuestos que incluye son los complementos perfectos tanto para cualquier exposición, como para hacer "un road trip" sin prisas por la costa.
Fotos: RM Sotheby's
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