Hace unos meses se juntaron en un mismo punto del planeta dos de los grandes símbolos del automovilismo. Por un lado la histórica Fórmula Ford, competición por la que han pasado cientos de pilotos y que es una de las que cuenta con más tradición en el viejo continente y ganadores con nombres como el de Eddie Irvine o Jenson Button. Por el otro, el infierno verde (nombre que le puso Jackie Stewart) o también conocido como el mítico circuito de Nordschleife. Un autentico reto para todo conductor que se atreve a poner un neumático en él.
En concreto el reto en esta ocasión trataba de hacer rodar un Fórmula Ford propulsado por el nuevo motor 1.0 Ecoboost de Ford. Una experiencia que fue todo un éxito después de conseguir marca un crono de 7 minuto y 22 segundos (undécimo mejor tiempo oficial por delante de los Ferrari Enzo o Lamborghini Aventador) a una velocidad media de 169 km/h para un coche que puede ser utilizado en la calle al permitirle ser matriculado como cualquier otro turismo.
El coche. Características técnicas:
Para este particular “reto”, el monoplaza estaba animado por el motor de tres cilindros de inyección directa y turbocompresor con el que Ford consiguió este año el título de el International Engine of the Year en las categorías de motor nuevo y de propulsor de menos de un litro de cilindrada. Unos 205 CV a 7.500 RPM empujan al conjunto que tiene un peso total de tan sólo 420 kilogramos.
Aunque no termina de haber datos oficiales al respecto, se habla de que el 0 a 100 de este Fórmula Ford tan especial podría estar por debajo de los cuatro segundos, con una velocidad punta de 255 km/h. A pesar de no exprimir todo el potencial del motor 1.0, podemos tener un rendimiento muy alto con un consumo contenido. A una velocidad de 120 km/h es de tan sólo 4,13 litros por cada 100 kilómetros.
¿Por qué os damos estos datos? Pues básicamente porque en Reino Unido ha surgido el rumor de que esta bestia de cuatro ruedas podría ser comercializada en el Reino Unido con una serie ultralimitada de tan sólo 50 unidades. Y es que como ya hemos dicho antes, este coche puede ser matriculado como cualquier otro salido de las factorías de la marca del ovalo, y cuenta con bocina, intermitentes y unos neumáticos de calle (en la prueba se utilizaron unos Dunlop SP Sport tallados semi-slick en medida 215/45 R13).
El precio obviamente es un poco prohibitivo al igual que otros coches de este tipo como puede ser el KTM X-Bow o el Ariel Atom. Se rumorea que podría rondar las 100.000 libras esterlinas, unos nada despreciables 124.000 €.
El video de este gran reto:
Como no todos podemos permitirnos estos caprichos, os dejamos con el video en el que podemos ver al experimentado piloto Nick Tandy sacándole todo el partido al motor 1.0 Ecoboost de Ford de 205 CV.
En Boxes Dunlop | Las diez competiciones con las que todo aficionado debería vibrar (Parte I) – Las diez competiciones con las que todo aficionado debería vibrar (Parte II)