A finales del pasado mes de agosto BMW presentaba por fin su nuevo deportivo, el BMW Z4, pero por entonces mostró únicamente la versión tope de gama o Z4 M40i. Ahora, mientras esperamos a su presentación oficial en el Salón de París, el próximo 2 de octubre, el fabricante bávaro ha detallado las versiones que habrá disponibles en el lanzamiento del modelo, en marzo de 2019.
Como ya os adelantamos en su día, inicialmente la gama estará compuesta por tres versiones, todas ellas de gasolina (Euro 6d-TEMP), turboalimentadas y con filtro de partículas. Hablamos de un sDrive20i de acceso, tetracilíndrico y con 197 CV, un sDrive30i también de cuatro cilindros pero con 258 CV y, finalmente, el M40i con motor de seis cilindros en línea y 340 CV.
Bastante controvertido por su diseño, el nuevo BMW Z4 2019 mide 4,32 metros de largo, 1,86 metros de ancho y 1,3 metros de alto, lo que supone unas dimensiones notablemente superiores a las de su predecesor, con 8,5 centímetros extra de longirtud, 7,4 centímetros adicionales en anchura y 1,3 centímetros más en altura. Ahora, además, la batalla es más corta y las vías más anchas.
Múltiples opciones en la gama
Este deportivo fabricado en las instalaciones de Magna Steyr en Graz, Austria (donde se producen por ejemplo el BMW Serie 5, el Jaguar I-PACE o el Mercedes-Benz Clase G) ofrece una paleta con nueve colores de carrocería (solo uno no metalizado) la capota de lona es de color negro de serie, si bien en opción hay un tono adicional Antracita con efecto plata.
Esta capota, por cierto, se pliega o despliega automáticamente en apenas 10 segundos y se puede operar a velocidades de hasta 50 km/h. Además, BMW destaca la capacidad del maletero, que es de 281 litros independientemente de la posición de la capota, lo que supone un 50% más de volumen con respecto al Z4 de anterior generación.
Por supuesto, BMW ofrece muchos aditamentos para hacer del Z4 un modelo más atractivo, con detalles de corte deportivo, enmarcados en la línea Sport Line y el paquete M Sport (elementos estéticos y llantas de aleación de 18 pulgadas en ambos casos). Las llantas son de 17 pulgadas en los cuatro cilindros y de 18 pulgadas en el M40i, habiendo juegos de 19 pulgadas en opción.
La dotación de equipamiento en el habitáculo también varía en función de la versión. En el sDrive30i, por ejemplo, la tapicería de los asientos deportivos es de cuero Vernasca (en negro, blanco, cognac o rojo) y con costuras en contraste, mientras que el tope de gala M40i ofrece tapicería de cuero y Alcantara con detalles en azul. Las molduras decorativas (plateadas de serie) pueden ser de aluminio o negro piano, y el paquete M Sport suma un volante M de cuero o pedalera deportiva M.
El nuevo Z4 estrena también un cuadro de instrumentos digital o BMW Live Cockpit Professional, formado por dos pantallas de 10,25 pulgadas. El sistema multimedia incluye navegador, disco duro, conectividad Bluetooth, Wi-Fi o dos puertos USB. Además, el modelo goza de actualizaciones remotas automáticas "over the air" y también puede contar con llave digital en nuestro smartphone, a través de la tecnología Near Field Communication (NFC).
Entre las asistencias a la conducción opcionales del Z4 destacan el control de crucero adaptativo con función Stop&Go, la alerta de cambio de carril o el asistente de aparcamiento. Tampoco faltan opciones como el Head-Up Display o los faros LED adaptativos.
Tres motorizaciones, al detalle
BMW Z4 M40i: La variante tope de gama, antesala de un hipotético Z4 M, recurre a un motor de 3.0 litros y seis cilindros en línea, que alcanza dicha potencia de 340 CV entre 5.000 y 6.500 rpm, y un par motor máximo de 500 Nm en un amplísimo rango de entre 1.600 y 4.500 vueltas. Esta versión se combina con una caja Steptronic automática de ocho relaciones y consigue un 0 a 100 km/h en 4,5 segundos y una punta de 250 km/h. ¿El consumo? Entrte 7,1 y 7,4 litros a los cien kilómetros (162-168 g/km de CO2), según las especificaciones de la unidad en cuestión.
BMW Z4 sDrive30i: El siguiente escalón -hacia abajo- es un cuatro cilindros de 2.0 litros de cilindrada, también en combinación con una caja automática Steptronic de ocho marchas. En este caso la potencia alcanza los 258 CV (también entre 5.000 y 6.500 rpm) y el par motor máximo es de 400 Nm entre 1.550 y 4.400 vueltas. El 0 a 100 km/h le lleva 5,4 segundos, alcanza también 250 km/h y homologa un consumo de 6 - 6,1 litros (137-139 g/km de CO2).
BMW Z4 sDrive20i: Por último, la variante básica del Z4 está también basada en el 2.0 litros de cuatro cilindros, pero con una potencia ligeramente más modesta: 197 CV entre 4.500 y 6.500 rpm. El par máximo en este caso es de 320 Nm entre 1.450 y 4.200 rpm, y el sprint de 0 a 100 km/h lo despacha en 6,6 segundos. La velocidad máxima es algo inferior, conformándose con 240 km/h. Por último, la transmisión también es la Steptronic de ocho relaciones y el consumo medio es idéntico al del 30i: entre 6 y 6,1 litros (137-139 g/km de CO2).
La marca alemana destaca de este Z4 una distribución de pesos perfecta, de 50:50 (el peso en vacío varía según versión entre 1.400 y 1.600 kilogramos), así como una dirección eléctrica de desmultiplicación variable o una avanzada suspensión, con un eje trasero multibrazo (de cinco brazos) con elementos de acero y aluminio que ayudan a conseguir la máxima ligereza.
En el caso de la versión tope de gama, M40i, son de serie la suspensión adaptativa M (rebaja la altura en 10 milímetros con respecto a la normal), los frenos deportivos M o el diferencial trasero M Sport de control electrónico.