Hace apenas un par de meses la marca checa Škoda mostraba su renovado Octavia, aunque se guardaba en la recámara la información e imágenes de versiones tan interesantes como el potente Octavia RS o el campero Scout. Hoy conocemos precisamente el primero de ellos, la variante deportiva de la gama, disponible tanto en carrocería sedán como familiar a partir de 2017.
El nuevo Škoda Octavia RS ofrece, como de costumbre, una alternativa gasolina y otra diésel, ambas de cuatro cilindros. El primer motor es un 2.0 TSI de 230 CV (10 CV extra y el Octavia de producción más potente de todos los tiempos), mientras el segundo es un 2.0 TDI que mantiene la potencia de su antecesor, es decir, 184 CV.
Uno de los aspectos más llamativos del renovado Octavia es su nueva mirada, que también está presente en el RS, protagonizada tanto por los faros full LED, de curioso diseño, como por la parrilla frontal de amyor anchura, las más generosas entradas de aire o los rediseñados paragolpes. La trasera está dominada por un difusor de color negro o pilotos LED en forma de 'C'.
El habitáculo destaca por su tapicería de cuero y tela (alcántara en opción), acabados en color negro (sporty black) y elementos como los asientos deportivos RS-Sport -con reposacabezas integrados y orejas para sujetar el cuerpo-, volante multifunción de cuero, iluminación ambiente, pedalera de aluminio o soluciones Simply-Clever, como un paraguas bajo el asiento del copiloto o una linterna LED portátil ubicada en el maletero. Además, el sistema multimedia más avanzado de la oferta (Columbus) ofrece pantalla de 9,2 pulgadas o conexión a Internet (hotspot WLAN y LTE).
A nivel dinámico, el Octavia RS recibe ajustes para estar a la altura de sus motorizaciones, empezando por una suspensión deportiva 15 milímetros más baja o por unas vías traseras ensanchadas en 30 milímetros. Además, las llantas de serie son de 17 pulgadas (18" y 19" en opción), las pinzas de freno van pintadas de color rojo y también se equipa la dirección 'progresiva', Dynamic Chasis Control (DCC) con varias durezas de suspensión, diferencial electrónico XDS+ o, ya en opción, el controvertido Performance Sound Generator, que utiliza los altavoces para hacer llegar sonido de motor al habitáculo.
La variante 2.0 TSI de 230 CV y 350 Nm (entre 1.500 y 4.600 RPM) despacha el 0 a 100 km/h en 6,7 segundos (es tracción delantera y manual de seis marchas -DSG en opción-) y alcanza 250 km/h, devolviendo un consumo medio homologado de 6,5 litros a los cien kilómetros (149 g/km de CO2). Por su parte, el 2.0 TDI de 184 CV y 380 Nm permite un 0-100 km/h en 7,9 segundos y una velocidad punta de 232 km/h, con un consumo de 4,5 litros (manual). Además, el TDI está disponible con tracción delantera y DSG en opción, o bien en variante 4x4 y con DSG de 6 marchas de serie.
Para terminar, la gama ofrece de serie asistentes de conducción como el Trailer Assist, asistente de ángulo muerto, alerta de tráfico cruzado o Front Assist con frenada automática de emergencia en ciudad y detección de peatones, entre otras cosas.
En Motorpasión | Así se muestra el Škoda Octavia 2017 en sus primeras imágenes