Buscando explorar nuevos segmentos más allá de los deportivos puros, llega Aston Martin y nos lanza una piedra en forma de render que podría significar su incursión en el mundo de los cupé ranchera. Es fácil pensar que habrían puesto el punto de mira en su más directo rival, el Ferrari GTC4Lusso.
La deportividad no tiene que estar reñida con la habitabilidad o poder realizar viajes largos. Así que como en el superlujo hay que renovarse o morir, los británicos estarían tanteando una propuesta de un cuatro plazas shooting break aprovechando el tirón del DB11 presentado recientemente en Ginebra.
De momento tenemos que conformarnos con esta simulación realizada por Rain Prisk, pero es algo que iría más allá de ser un boceto. Andy Palmer (CEO de Aston Martin) admitió que el DB11 no es el único coche importante en el que la marca británica ha estado trabajando.
Además, todo apunta a que la nueva arquitectura modular del chasis está pensada para dar cabida a otros nuevos integrantes en la familia de los cupés sin tener que disparar los costes de desarrollo al tener buena parte del trabajo ya hecho de antemano.
Sobre el motor que propulsaría a esta ranchera de altos vuelos podríamos pensar en el nuevo V12 twin turbo de 5,2 litros o en alguna versión derivada de este avanzado motor que no llegase hasta los 608 caballos de potencia del DB11.
El Ferrari GTC4Lusso es la segunda generación de este particular segmento dentro de la marca italiana tras la buena acogida del Ferrari FF (pese al susto de los seguidores más tradicionales del cavallino). La nueva versión equipa un V12 de 6,3 litros y 690 caballos además de conservar la tracción total e incluir un sistema de eje trasero direccional.
Estas soluciones serían demasiado aventuradas para un plausible Aston Martin Shooting Break, de una familia más conservadora, pero lanzarse a un mercado en el que el italiano está campando a sus anchas parece una idea bastante razonable.