A finales de mayo, Aston Martin confirmó que había comenzado la producción de su Aston Martin DB5 Golfinger Continuation y ahora el primero de esta edición limitada a 25 unidades ya está listo. Se trata de la última joya del programa de restauración de la firma de Warwickshire y básicamente devuelve a la vida al mítico Aston Martin DB5, que además viene equipado con los gadgets de James Bond.
Concebido en la factoría de Newport Pagnell de Aston Martin, la misma planta donde los 900 Aston Martin DB5 originales vieron la luz entre 1963 y 1965, este Job 1 por fin nos permite ver al resucitado DB5 con apellido Golfinger que se anunció hace ya dos años.
Su afortunado propietario ya lo tiene en su garaje y durante toda la segunda mitad de este 2020 se hará entrega de los 24 modelos restantes de esta exclusiva versión limitada que, por cierto, ya tienen dueño.
Sentirse como el mismísimo 007 no está precisamente al alcance de cualquiera: cada uno de estos Aston Martin DB5 Golfinger Continuation cuesta la friolera de 2,75 millones de libras antes de impuestos, lo que se traduce en unos 3 millones de euros al cambio.
Gadgets mezclados no agitados de serie, algunos funcionales
Con un chasis de acero templado sobre el que se asientan unos paneles de carrocería en aluminio que copian a la perfección al DB5 de los años 60, lo que incluye la pintura Silver Birch, este Aston Martin DB5 Golfinger cobra vida gracias a un propulsor atmosférico de 4.0 litros y 290 CV de entrega. Este bloque de seis cilindros en línea cuenta entre sus ingredientes con una cabeza de seis bujías, tres carburadores SU y refrigerador de aceite.
Además, como buen restomod, dispone de chucherías técnicas modernas, como un cambio manual ZF de seis velocidades, un diferencial mecánico autoblocante para su eje trasero o frenos de disco servoasistidos tipo Girling. Por su parte, para no hacernos olvidar que estamos ante un DB5, la dirección es de cremallera y no cuenta con ningún tipo de asistencia.
Pero lo más increíble del DB5 Golfinger Continuation es que esconde una buena ensalda de gadgets de serie inspirados en los utilizados en las películas de James Bond. No en vano, es el coche que más veces ha acompañado al agente secreto al servicio de su majestad: un total de ocho incluyendo la nueva entrega, 'Sin tiempo para morir'.
Para ello, Aston Martin ha contado con la partición de Chris Corbould, supervisor de efectos especiales en más de doce películas de la saga entre las que se encuentran las cinco últimas.
Muchos de estos gadgets son completamente funcionales, como el sistema de pantalla de humo trasero, las matrículas delanteras giratorias intercambiables (hasta tres), los arietes de las defensas o el escudo trasero blindando resistente a las balas. De forma opcional puede equipar panel de techo para el pasajero extraíble.
Otros, son simulados, como el sistema trasero de expulsión de aceite, las ametralladoras alojadas bajo los faros delanteros o las cuchillas retráctiles de las llantas.
Además, en el habitáculo sigue la fiesta, pues el Aston Martin DB5 Golfinger equipa pantalla con radar de seguimiento y botón de propulsión para el asiento del copiloto en el pomo del cambio (ambos también simulados), una bandeja oculta con armas bajo el asiento del conductor o cuadro de mandos en el túnel central para activar algunos de estos dispositivos.
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