Volvo lo ha vuelto hacer. Tomando como punto de partida las majestuosas berlinas de representación, el fabricante sueco acaba de presentar antes de la apertura del Salón de Ginebra un lavado de cara para los Volvo S90, Volvo V90 y Volvo V90 Cross Country.
De cara a 2020 las tres carrocerías incorporarán algunos cambios en su diseño pero también incluirán una revisión de su equipamiento así como la ampliación de las mecánicas mild hybrid en toda la gama.
Volvo S90 y V90, aún más sofisticados
Posiblemente la sobriedad y el estilo minimalista de Volvo nos ponga a la mayoría de acuerdo en que ofrecen un conjunto atractivo a la vista y que digiere muy bien el paso de los años. No hay grandes cambios para este facelift, pero sí los suficientes como para diferenciarlos del modelo que conocíamos hasta ahora.
Por la parte delantera podemos diferenciar a los nuevos Volvo S90 y V90 por un paragolpes con una zona inferior mucho más marcada que antes, resaltando la gran parrilla superior con franjas verticales y acompañado además por unos nuevos faros antiniebla.
En la parte trasera también hay retoques con la adopción de unos nuevos grupos ópticos full LED que ahora equipan intermitentes secuenciales. También hay novedades en la paleta de colores a elegir así como diseños de llantas inéditos.
A nivel mecánico se ha tomado la iniciativa seguida en los XC90 y XC60, adoptando para los Volvo S90 y V90 las mecánicas semihíbridas, introduciéndose también en la gama V90 Cross Country y suponiendo la primera incursión de estas mecánicas en esta variante de aptitudes camperas.
Con la adopción del sistema mild hybrid de 48V junto con otras medidas como la frenada regenerativa más eficiente gracias al brake-by-wire (frenado por cable), Volvo asegura que estos modelos pueden reducir el consumo de combustible en hasta un 15%. A mediados de 2020 llegarán las nuevas mecánicas híbridas enchufables Recharge T6 AWD y Recharge T8 AWD con 340 y 390 CV respectivamente.
Estos nuevos S90 y V90 incorporarán de serie un elemento desarrollado inicialmente para el mercado chino. Se trata de un filtro de aire avanzado con sesor de partículas que permitirá a los ocupantes controlar la calidad del aire, pudiendo filtrar las partículas del aire más ínfimas tanto del exterior como del interior del coche.
Para mejorar aún más la experiencia a bordo la firma nórdica ha incluido una revisión del equipo de sonido Bowers & Wilkins, incluyendo un nuevo amplificador, sistema de cancelación de ruido y un ajuste ambiental específico.
También se han instalado puntos de carga USB y 12V, además de una plataforma de carga inalámbrica y nuevos materiales para las tapicerías de lana y la opción de un interior sin cuero en los acabados superiores.
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