El fabricante sueco Volvo ha anunciado hoy su estrategia de electrificación, en la que los híbridos enchufables se expandirán por toda su gama de vehículos, ya que según la compañía los vehículos con motores eléctricos supondrán en el medio plazo en torno al 10% de sus ventas. No obstante, también planean un vehículo cien por cien eléctrico, que debería estar a la venta para el año 2019.
El primer paso de esta estrategia es introducir híbridos enchufables en las gamas 90 y 60, sobre la nueva plataforma de la compañía (SPA o Scalable Product Architecture), proceso que ya ha comenzado con el lanzamiento de los XC90 y V60 Twin Engine y que continuará más adelante con la versión híbrida enchufable del futuro sedán premium de la casa, el buque insignia Volvo S90.
La marca sueca, que también ofrecerá variantes de tracción delantera de los Twin Engine (hibridos enchufables), pretende lanzar una nueva gama de la serie 40, sobre la plataforma para modelos compactos (CMA o Compact Modular Architecture), que como la SPA, está preparada para la electrificación (tanto para híbridos enchufables como vehículos completamente eléctricos).
"Creemos que ha llegado el momento de que el coche electrificado deje de ser un producto de nicho y llegue al gran público. Confiamos en que en un par de años el 10% de las ventas globales de Volvo correspondan a modelos con motores eléctricos", afirma Håkan Samuelsson, presidente y CEO de Volvo Cars. "Nuestros estudios han confirmado que los clientes de modelos Twin Engine conducen en modo eléctrico hasta un 50% del tiempo, lo que confirma que estas versiones son una alternativa real a los sistemas de propulsión convencionales", concluye.
En Motorpasión | Volvo XC90 2015, a prueba. Caballo ganador