Los coches con motores gordos están en peligro de extinción, al menos si hablamos de Europa y de mecánicas de combustión, pero los amantes de los coches siempre encontraremos una forma de disfrutar de nuestra afición,
Y no me refiero solo a los coches clásicos o a los simuladores de conducción, sino al bricolaje. Sí, puede sonar raro, pero un petrolhead ha encontrado la manera de hacerlo metiéndole un mini motor V8 de gasolina a su taladro.
Un motor V8 a golpe de gatillo
Hay una herramienta imprescindible para cualquier aficionado al bricolaje: el taladro. Normalmente, estos aparatos también sirven para atornillar y los hay de dos tipos, pero siempre eléctrico: alimentados con batería o a través de un cable que se conecta con cualquier enchufe.
Los dos tienen inconvenientes: los de batería porque hay que cargarla y no dura demasiado, mientras que los de cable son menos versátiles porque obligan a tener un enchufe cerca o a tirar de alargadera, además de que el cable suele ser un incordio.
Pues bien, en el canal de YouTube Lets Learn Something han pesado que la solución es meter un motor V8 de gasolina al taladro/atornillador para ni depender de enchufes ni de baterías. Basta con echar gasolina para colgar cuadros, montar muebles o hacer cualquier otro trabajo que implique taladrar, atornillar o desatornillar.
La cuestión es que un taladro debe pesar poco porque debe ser manejable, entonces ¿como va a tener un motor V8? Pues muy fácil, con una mecánica de tamaño mini y mucha destreza para acoplarla a la herramienta.
Los motores V8 de gasolina en miniatura son relativamente populares desde hace tiempo. Hay verdaderas obras de arte de la mecánica a escala que son plenamente funcionales y en Let’s Learn Something han decidido aprovechar este tipo de bloques para fabricar el taladro más petrolhead del mundo.
En un vídeo de poco más de 13 minutos muestran cómo han acoplado a un viejo taladro de batería un motor Toyan V8 que se puede comprar listo para funcionar. En realidad es un motor V8 de 28 centímetros cúbicos que está diseñado para dar vida a coches de radiocontrol, pero ya vemos que puede tener otras utilidades.
En este caso, cuenta con un pequeñísimo depósito de gasolina y otro todavía más pequeño para el refrigerante. El acelerador es el gatillo del taladro, el motor de arranque está situado donde antes iba la batería y la herramienta funciona perfectamente, de hecho, es capaz de perforar piezas de acero aparentemente con más facilidad que mi Bosch de cable. Además, suena mejor y deja una agradable fragancia a gasolina.
Está claro que cualquier taladro inalámbrico o con cable será más ligero y manejable, pero ninguno mola tanto como este maravilloso invento que sería el complemento perfecto al garaje de cualquier petrolhead.
Imágenes: YouTube Let's Learn Something