Nunca 1.000 caballos fueron tan sencillos de domar. Coincidiendo con el espíritu olímpico, Londres ha visto reforzada ad infinitum la seguridad alrededor del Támesis, así que durante las últimas semanas no ha sido el mejor lugar del mundo para saltarse la ley. Un ejemplo lo tenemos en el caso del Bugatti Veyron de las imágenes, que fue apresado por un policía que… sí, montaba en bici.
Curiosa estampa la que dejó el poderosísimo deportivo sin poder pasar de ritmo de pedaleo por la calle mientras su captor lo dirigía entre el tráfico con mano diestra. ¿Qué delito había cometido su conductor? Circular sin placa de matrícula delantera, que en Reino Unido pasa como en España: es obligatoria.
Para el caso, el conductor no fue multado sino que simplemente recibió una advertencia por parte del agente de Policía que lo pilló. Eso sí, seguro que el paseíto detrás de la bici tarda en olvidarlo, para que luego digan que todo en la vida es multar. Tremenda diferencia entre este episodio y el duelo al sol de Nueva York que veíamos hace un rato, ¿eh?
Vía | World Car Fans
Vídeo | Supercars of London (YouTube)
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