Los coches han sido bastante protagonistas en la visita de Kim Jon-un a Rusia de este mes de septiembre. Primero vimos como alguien tuvo la complicada tarea de embutir el Maybach 62 S del líder supremo de Corea del Norte en el tren con el que viajó desde Pyongyang.
Y ahora salen a luz vídeos que nos dejan una incógnita interesante: el gran séquito sobre ruedas que escoltaba su limusina personal tenía como protagonistas cuatro Hyundai Staria. Sí, Hyundai. Pero es que encima su logo no ha sido censurado por la televisión estatal, al menos en uno de estos coches escolta.
¿Epic fail?
El proteccionismo de Corea del Norte respecto a todo lo que provenga de Corea del Sur es habitual. Para ejemplo, la retransmisión del Mundial de fútbol celebrado en Catar el año pasado: Hyundai fue uno de los patrocinadores y la Televisión Central Coreana (KCTV por sus siglas en inglés) eliminó los carteles publicitarios de la marca, que no eran pocos.
Tremendo y laborioso trabajo para la cita catarí contrastan con el tratamiento que la misma KCTV ha tenido con el documental que ha inmortalizado el periplo del dictador norcoreano en Rusia.
Uno de los emblemas de los cuatro Hyundai Staria, completamente visible. De 90 minutos y bautizado como "Un nuevo hito para el desarrollo de la relación entre Corea del Norte y Rusia", este documental retrató el encuentro entre Jong Un y Vladímir Putin en la región de Vladivostok.
Y no son pocas las secuencias de este documental con el convoy que llevó al líder coreano: desde su visita al ballet en el Teatro Mariinsky, pasando por la de la Universidad Federal del Lejano Oriente en la isla Russky o la del Acuario Primorsky hasta la última parada en Arnika Bio-Feed Mill. Imágenes que ha reproducido Yonhap, la agencia de noticias de Corea del Sur, y publicado en un vídeo en su canal de YouTube.
En todas ellas, el cuarteto de Hyundai Staria estaba presente. Y en las imágenes se aprecia a la perfección el logotipo de Hyundai en uno de estos monovolúmenes luciendo sin pudor alguno: el que abre la comitiva. Por el contrario, en el resto de los Staria sí que parece que ha sido difuminado.
Por la matrícula, que utiliza la nomenclatura alfanumérica de las placas de Rusia, se entiende que trataba de coches policiales puestos a disposición por el gobierno de Putin para proteger la comitiva de la limusina de Kim Jon-un.
¿Un gesto de apertura hacia Corea del Sur? Sobre este inusual movimiento se ha pronunciado un alto funcionario del Ministerio de Unificación. Aunque sin dar muchos detalles y queriendo permanecer en el anonimato. Tampoco ha querido valorar la intención de Corea del Norte respecto a la marca estrella surcoreana de coches, así como si los Hyundai Staria fueron facilitados por Rusia.
Por otro lado, no es que las relaciones de Hyundai con Rusia sean buenas: la marca adelantó esta primavera su intención de abandonar el país, con el conflicto contra Ucrania aún presente. También de vender sus fábricas presentes en el país.
Y tampoco es que haya sentado bien este nuevo encuentro entre Kim Jon-un y Putin: ha sido criticado por el presidente de Corea del Sur Yoon Suk-yeol. Es más, mencionó que una posible colaboración de armamento entre ambas potencias lo tomarían como "provocación directa", según recoge The Korea Herald.
Todo apunta a un más que probable desliz de KCTV, dado que sí parece que lo eliminaron en tres de los cuatro Staria. Y al igual que con el encargado de meter su limusina en el tren, no nos gustaría estar en el pellejo del responsable de la realización.