El especialista alemán mcchip-dkr acaba de desvelar su última creación, basada en el ya de por sí brutal Mercedes-Benz G 63 AMG que, según la compañía, necesitaba aún más potencia, más altura libre al suelo y, por qué no, una mayor presencia, gracias a los 24 centímetros de anchura extra de los que goza. ¡Menudo bicho!
Imaginamos que con ánimo de hacerlo parecerse a su hermano, el Mercedes-Benz G 500 4x4², el preparador, además de ensancharlo, eleva su altura en 15 centímetros y lo dota de una suspensión adaptativa KW DCC, que permite elegir entre varios modos de dureza a través de botones en el habitáculo, y unos enormes neumáticos off-road de 18 pulgadas.
Para el motor 5.5 litros V8 biturbo también han tenido tiempo, así que atrás quedan los 544 CV de fábrica, a favor de una potencia máxima de 810 CV y un par motor máximo que pasa de 760 a 950 Nm, nada menos. Todo se debe a turbocompresores específicos, cambios electrónicos y un nuevo sistema de escape. Ahora es capaz de alcanzar una velocidad limitada a 229 km/h (210 km/h de serie) y frena gracias a un equipo MOV'IT.