Debe de ser frustrante salir del concesionario con tu flamante coche de 150.000 euros para descubrir que no puedes pasar por tu barrio o entrar a tu garaje debido a la suspensión rebajada. La entrada del garaje y el badén de la esquina han pasado de ser un elemento accesorio en tu vida a convertirse en tus peores enemigos, superando incluso al vecino que toca la guitarra o al nuevo novio de tu ex.
Algunos deportivos permiten elevar la suspensión para sortear estas dificultades, ¿pero qué pasa con los que no? Cargraphic Airlift es un producto que se presentará en el Essen Motor Show.
Se trata de un elevador de la suspensión diseñado para el Porsche 911 que permite levantar 5,5 centímetros el coche activando un botón, algo que incluso podemos hacer a bajas velocidades para no tener que detener el coche. La velocidad a la que se eleva es regulable, en función de la velocidad del coche.
Según el fabricante, este sistema no influye en la electrónica ni en la mecánica del coche, es decir, no tiene efectos secundarios. Sólo le falta añadir unos embellecedores en los pasos de rueda y una defensa metálica en el frontal para convertir el 911 en un pequeño “SUV a tiempo parcial”.
Fuente | Cargraphic