Uno de los pocos todoterreno auténticos que quedan en el mercado se renueva. El nuevo Toyota Land Cruiser se presenta en el Salón de Frankfurt, con un diseño más moderno y un habitáculo más lujoso y refinado, pero manteniendo su robusta estética y sus incuestionables capacidades fuera de la carretera.
El Toyota Land Cruiser 2018 es ahora más largo, concretamente 6 centímetros para un total de 4,84 metros en el modelo de cinco puertas y 4,57 metros en el de tres, pero mantiene sus conocidas formas. Son de nuevo diseño el capó, la parrilla, los faros, los paragolpes y los pasos de rueda, por ejemplo. Están disponibles diez colores de carrocería, incluidos dos nuevos (azul y bronce).
Según Toyota, el capó se ha optimizado para mejorar la visibilidad frontal y los pasos de rueda se han elevado para permitir al conductor calcular mejor las dimensiones del vehículo a la hora de maniobrar. También se colocan en una posición más alta los faros (que pueden ser halógenos o LED) y la parrilla, para mejorar las capacidades off-road.
La altura libre al suelo es, como mínimo, de 21,5 centímetros en el cinco puertas y 20,5 centímetros en el tres puertas, con ángulos todoterreno de 31 grados (ataque), 25 grados (salida) y 22 grados (ventral). La oferta de llantas incluye opciones de 17, 18 y 19 pulgadas, en diferentes diseños y acabados.
En nuestro mercado estará disponible exclusivamente con el motor 2.8 litros D-4D turbodiésel de 177 CV a 3.400 RPM y 450 de par máximo entre 1.600 y 2.400 vueltas, junto a una transmisión automática de seis marchas (0-100 km/h en 12,1 segunos y 175 km/h de punta, con 7,4 litros de consumo medio). La variante manual de seis relaciones ofrece las mismas prestaciones, pero 420 Nm de par máximo. En otros mercados también habrá opciones de gasolina (2.7 y 4.0 VVT-i de 161 y 249 CV respectivamente).
Nuevo interior, de mayor calidad
Toyota asegura que por diseño y calidad, el habitáculo del nuevo Land Cruiser da un importante salto hacia delante. Nuevo diseño para el cuadro de instrumentos y la consola central, acabados más cuidados y materiales de mayor calidad son sus señas de identidad.
El salpicadero cuenta con una nueva pantalla multimedia a color de 8 pulgadas, el volante es de nuevo diseño y la consola, con acabados en apariencia de metal esculpido y zonas de apoyo para las rodillas de los ocupantes, incluye mandos de la climatización de nuevo diseño y controles diferenciados por zonas para todo lo relacionado con la conducción y el resto de mandos.
El nuevo cuadro de instrumentos incorpora una pantalla central TFT de 4,2 pulgadas para mostrar toda la información relevante de la conducción (vehículo, navegación, audio, asistentes de conducción, mensajes de alerta, etc...), y se controla desde los mandos del propio volante. También hay iluminación ambiente de color blanco para instrumentos, consola y botones de las puertas, así como en la zona de los pies, el plafón central del techo o la guantera.
Los asientos, además, ahora pueden incorporar calefacción y ventilación, y se ofrecen con tapicerías de tres colores (marrón, negro/marrón y beige). En cuanto a molduras decorativas, a las de aspecto metálico se suman como opción las de madera, en tono claro u oscuro. Calefacción en la banqueta trasera, climatizador automático, parabrisas climatizado o una llave de nuevo diseño, también son novedad.
Para terminar, el Land Cruiser 2018 contará también con lo último de Toyota Safety Sense, como el sistema pre-colisión, la detección de peatones, el control de crucero adaptativo, la alerta de cambio involuntario de carril, la alerta de tráfico cruzado, el asistente de ángulo muerto, el indicador de presión de neumáticos o las luces de carretera automáticas.