La presentación en España del Toyota Camry comenzó de una forma muy distinta a la habitual. Sentados en las plazas traseras de esta berlina del segmento D recorrimos el centro de Madrid mientras un chófer nos llevaba a la rueda de prensa, tal vez para adelantar que este coche irá dirigido principalmente a flotas. Uber y Cabify, aquí tenéis una nueva opción.
El Toyota Camry no es una berlina más
Tal vez el nombre Toyota Camry no te suene demasiado, ya que de las siete generaciones previas que se han vendido desde 1981, apenas han llegado unidades a nuestro país.
Pero lo cierto es que el Camry es un superventas mundial con todas las letras, uno de esos coches que ha triundado en todo el mundo, tal y como demuestran las más de 19 millones de unidades que se han vendido en todo el mundo a lo largo de su historia.
Estados Unidos es su principal mercado, donde durante años ha sido la berlina más vendida y donde ha llegado a alcanzar el sexto puesto en el total del mercado.
¿Por qué viene ahora a España?
Las berlinas del segmento D están viviendo una nueva vida gracias en parte a las nuevas formas de movilidad que han llegado a las ciudades como alternativa a los taxis.
Uber, Cabify, FreeNow son ejemplos de empresas que dan servicio de movilidad como alternativa a los taxis tradicionales, y son precisamente las flotas que componen esas empresas quienes demandan berlinas del segmento D como el nuevo Toyota Camry.
Después de saber que el 70% de las ventas de este modelo en España irán dirigidas a flotas, entendemos por qué la presentación del mismo comenzó con nosotros sentados en el cómodo asiento posterior.
Solidez en los trazos
Que el Toyota Camry es un gran coche es algo que salta a la vista nada más tenerlo delante. No solo sus 4,88 metros de largo hacen que se vea contundente sobre el asfalto.
El diseño del frontal, con trazos paralelos al suelo y una parrilla delantera muy marcada, así como unas ópticas más afiladas de lo habitual en los modelos de la marca japonesa, son sus principales señas de identidad.
En la vista lateral destaca la enorme distancia entre ejes de 2,8 metros, pero más si cabe el enorme voladizo posterior que crece desde el pilar C de forma muy destacada.
El Carmy se construye sobre la nueva plataforma TNGA-K, desarrollada a parir de la Toyota New Global Architecture (TNGA) y además de asegurar un tamaño interior considerable, también permite disfrutar de 524 litros de maletero en las versiones con asientos traseros normales, que se reducen a 500 litros en las versiones con asientos posteriores reclinables.
Visto desde atrás entre el tráfico urbano, su línea no tiene mucho que envidiar a la de, por citar un ejemplo cercano, el Lexus GS. Se ve sólido, robusto y capaz de convencer a aquellos que buscan un coche que transmitan confianza.
El noveno híbrido de Toyota, con un interior de primera
El Toyota Camry llega a España como un híbrido al montar el motor 2.5 Dynamic Force de 218 CV, el mismo que monta RAV4 hybrid, que según datos de la marca y a falta de corroborarlo con una prueba en profundidad, promete hacer hasta 4,3 kilómetros con emisiones cero y alcanzar hasta 125 km/h en este modo. Tiene etiqueta ECO de la DGT.
Disponible con tres niveles de equipamiento, Business, Advance y Luxury, lógicamente la primera es la más sencilla dirigida a esas flotas de las que hablábamos al comienzo de esta primera toma de contacto.
En cambio la versión Luxury destaca por su amplio equipamiento y por contar con algunos detalles que le acercan a las grandes berlinas de representación, esas pensadas para dejar que alguien conduzca por tí e ir disfrutando de las plazas posteriores.
Así, en el interior además de unos materiales de alta calidad, una superficie acristalada bastante amplia gracias a la baja cintura del coche y detalles como la climatización Nanoe que mantiene los niveles de humedad para que, por ejemplo al poner el aire acondicionado el interior no se reseque, cuenta con otros elementos que nos llamaron la atención.
Me refiero a la pantalla que se integra en el reposabrazos central posterior, que permite entre otras cosas manejar los mandos de climatización, reclinar los asientos hasta encontrar la postura más cómoda para que el chófer te lleve, manejar los mandos del sistema de audio o incluso subir la cortinilla eléctrica posterior para ganar privacidad.
El confort de marcha como principal premisa
Lógicamente por ser un coche del segmento de las grandes berlinas, el Toyota Camry se ha desarrollado pensando en ofrecer el mayor confort de marcha posible tanto a sus ocupantes como a quien lo conduce.
Este por cierto contará con una nueva transmisión secuencial Shiftmatic que permite al conductor “cambiar de marcha” de forma simulada, algo que desde los asientos posteriores es poco perceptible pero que os contaremos cómo funciona y qué se siente más adelante.
El motor cuenta con un nuevo sistema de soportes de cuatro puntos que además de reducir las vibraciones que se transmiten al habitáculo, también dota al conjunto de una mayor rigidez. Por si fuese poco, cuentan en Toyota que se han mejorado los niveles de aislamiento del vano motor y de los pasos de ruedas.
A ello se une el hecho de que la suspensión es MacPherson delante y de doble triángulo detrás. En ámbito urbano y dejando que te lleven, sí que es suave y confortable como prometen.
Los precios de la gama Toyota Camry
El nuevo Toyota Camry sustituye en el mercado al Avensis híbrido y tiene como rivales más directos a modelos como los Skoda Superb, Opel Insignia, Ford Mondeo o Skoda Octavia entre otros.
Los precios son los siguientes:
- Camry 220H Business: 32.300 euros.
- Camry 220H Advance: 32.500 euros.
- Camry 220H Luxury: 38.000 euros.
También pensando en las flotas que prefieren tener los coches en modalidad de renting, el Toyota Camry se ofrece por 450 €/mes para el acabado intermedio Advance.