En cuestión de una semana se presentará en Facebook y Twitter, y de cara al Salón de Frankfurt, el Jaguar C-X17, que es el nombre en clave que de momento recibe el SUV de la marca de Tata Motors. ¿Detalles? Por el momento ni uno. A ciegas, como se estilan muchos de los últimos teasers de coches que se sueltan antes de los salones.
Jaguar ha tenido que rectificar sus planes de 2010, cuando incorporar un SUV a la gama producía sarpullidos en la casa. El mercado manda, no obstante, y si a Porsche, por ejemplo, le está funcionando un modelo por el que pocos daban un duro euro años ha, ¿quiénes son los principios para interponerse en una cuestión de intereses?
No es una crítica: es una constatación. Si el mercado lo pide (o se le educa para que lo pida), hay que dárselo. Recordemos que los SUV es un segmento rentable, y recordemos que Jaguar anda reconsiderando su gama, de manera que todo encaja perfectamente. A partir de ahí, podemos elucubrar cómo será el Jaguar C-X17. De momento, las formas son sugerentes y hacen presagiar que la rotundidad de formas estará bien apaciguada con un diseño adeportivado. Más, cuando toque.
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