El Hyundai Grand Santa Fe es el nuevo modelo de la marca coreana que llega como sustituto, por tamaño, del ix55. Esta versión de batalla larga y siete plazas del Santa Fe es un modelo de mucha importancia para la marca en Europa, ya que pretenden que el 25% de los Santa Fe que se vendan en este mercado correspondan al Grand Santa Fe.
Presentado inicialmente en el Salón Internacional de Nueva York de 2012, hasta ahora no se habían decidido a traerlo a Europa. Ahora que lo han hecho y tras presentarlo en el Salón de Ginebra, han modificado unas cuantas cosas para adaptarlo a las necesidades de nuestro mercado, que todavía sigue siendo bastante diferente al norteamericano. ¿Queréis saber qué ofrece?
Lo primero que tengo que decir, es que el Hyundai Grand Santa Fe me ha sorprendido por lo acertado de su aspecto exterior. Con sus formas basadas en el “Storm Edge” de Hyundai, hay que admitir que si lo comparamos con un ix35 el salto cualitativo en cuanto al diseño es más que evidente.
Con sus 4,91 metros de largo (22,5 centímetros más que un Santa Fe), 10 centímetros más de batalla y 5 centímetros más de ancho, las diferencias respecto al Santa Fe saltan a la vista. Es cierto que el diseño de ambos modelos guarda muchas similitudes, pero el Grand Santa Fe se identifica fácilmente por detalles como la doble salida de escape trasera o el diseño específico de las ópticas traseras.
También destacan las llantas de 18 o 19 pulgadas disponibles para las dos versiones, Tecno y Style. En general el conjunto transmite gran robustez, gracias entre otras cosas a las puertas traseras más largas, que permiten entrar de una forma más cómoda a la segunda y tecera fila de asientos y a una tercera ventanilla trasera de dimensiones muy superiores a las de un Santa Fe normal.
Interior de idéntico diseño pero más amplio
Si os habéis fijado mínimamente, el diseño del salpicadero del Grand Santa Fe es el mismo del Santa Fe. Simplemente se ha adaptado a las nuevas dimensiones. Es por ello que el cambio más significativo entre ambos modelos lo encontramos en el espacio disponible para los ocupantes de las filas posteriores.
Los ocupantes de la segunda fila disponen de 10 mm más de espacio para la cabeza y 50 mm más para las piernas, mientras que en la tercera fila el aumento es de 33 y 35 mm respectivamente. Con la tercera fila de asientos plegada, la capacidad del maletero es de 634 litros, 49 más que en el Santa Fe. Eso si, como es lógico cuando hay que usar la tercera fila de asientos la capacidad del maletero se reduce considerablemente porque los asientos ocupan en espacio de carga.
El interior ha mejorado mucho en cuanto a diseño y tacto respecto a otros Hyundai que había conducido, aunque es cierto que hacía más de cuatro años que no me subía en un modelo de esta marca. Destaca la pantalla que preside el salpicadero de todas las versiones, la iluminación del cuadro de mandos que varía dependiendo de la intensidad de la luz exterior o el enorme techo solar que va desde la primera hasta la tercera fila de asientos.
Además es novedad para los ocupantes de esa tercera fila la incorporación de climatizador completamente independiente. El equipamiento de serie es bastante completo, y destaca el sistema Flex Steer que permite elegir con sólo pulsar un botón entre tres niveles de dureza de la dirección (normal, deportivo o confort).
La disposición de los asientos permite una modularidad bastante amplia, pudiendo elegir entre llevar los asientos de la tecera fila abatidos de uno en uno, mover los asientos de la segunda fila adelante o atrás dependiendo de las necesidades de espacio, etc. En Estados Unidos se vende con configuración de seis asientos, aunque en Europa no se ha optado por esa opción.
El motor que mueve el Grand Santa Fe
Bajo el capó se esconde un motor de cuatro cilindros y 2.199 centímetros cúbicos turbodiésel que responde a la denominación 2.2CRDi. Este motor entrega 197 caballos a 3.800 revoluciones y 436 Nm de par entre 1.800 y 2.500 revoluciones por minuto. Sólo está disponible combinado con caja de cambios Automática secuencial H-matic de 6 velocidades.
Durante la presentación tuvimos oportunidad de conducir el coche durante 100 kilómetros por los alrededores de Madrid, principalmente por autovía pero también por carreteras nacionales y algún tramo urbano. Lo primero que me llamó la atención fue que el conjunto está muy bien aislado, ya que el motor apenas se escucha y el ruido aerodinámico es mínimo.
Por otro lado el motor se defiende bien, aunque no debemos esperar grandes prestaciones. Acelera de 0 a 100 km/h en 10,3 segundos y alcanza una velocidad punta de 200 kilómetros por hora. Son unas prestaciones acordes con la potencia que desarrolla si tenemos en cuenta que pesa 2.056 kilos de peso y que mide casi cinco metros de largo.
Por carretera el coche destaca por la suavidad de marcha con la que se mueve, lo cual unido a ese aislamiento acústico del que hablábamos hace un rato, hacen de el un coche perfecto para hacer largos viajes cómodamente. La caja de cambios automática secuencial carece de levas para el cambio, por lo que si quieres cambiar tu de marchas tendrás que hacerlo a través de la palanca de cambios con movimientos hacia delante y atrás.
Tal vez la caja de cambios sea su punto más débil, ya que con sólo seis marchas y un comportamiento un tanto caprichoso en algunas circunstancias, está lejos de otras cajas que incorpora algún competidor, como por ejemplo el BMW X5 con la caja automática de ocho velocidades.
Por lo demás el tacto del conjunto es muy agradable. Si necesitas potencia los 436 Nm que entrega desde 1.800 revoluciones son un buen alidado ya que hacen que el conjunto alcance la velocidad que necesitas sin tener que bajar más de dos marchas. El la zona media del cuentarevoluciones el comportamiento es bastante neutro y no hay necesidad de estirar demasiado las revoluciones.
Después de el recorrido inicial por autovía, nos fuimos hacia el interior de la sierra de Madrid. En zonas urbanas pasamos por varios badenes y a pesar de que la unidad de pruebas llevaba las llantas de 19 pulgadas, el conjunto no se mostró especialmente duro. Absorbe bien las irregularidades del terreno y eso redunda en un mejor confort.
Poco más pudimos comprobar durante el recorrido. El coche en general se siente más ágil de lo que puedes esperar viendo su peso y dimensiones. En condiciones normales es un 4x2 y cuando el nivel de agarre es bajo, reparte el par hasta un 50% al otro eje. Este sistema de reparto de par ha sido desarrollado en Idiada en España.
Precios del Hyundai Grand Santa Fe
El Hyundai Grand Santa Fe ya está a la venta y lo hace con dos niveles de equipamiento, Tecno y Style. El Tecno cuesta 46.640 euros mientras el Style sube hasta los 49.690 euros. Respecto a un Santa Fe supone poco más de 3.000 euros extra de precio. De los 2.000 Santa Fe que Hyundai espera vender en año completo, 500 de ellos deberían corresponder al Grand Santa Fe.
Como el resto de la gama Hyundai dispone de cinco años de garantía y además todos los clientes tienen un mes o 2.000 kilómetros para poder devolverlo si el coche no les convence.