Oh, China. País de comida exótica, cuna de coches eléctricos y el lugar donde nacen coches de ensueño a precio ajustado. La peculiar normativa del gigante asiático a veces permite maravillas como esta pick-up Foton General G9.
Sí, es una pick-up gigantesca, con un diseño muy americano y un aspecto amenazador, pero no, no es una Ford F-150 aunque se le parece mucho más de lo que le gustaría a Ford. Es una copia descarada de las que sólo puede ocurrir en China.
General G9, o cómo Foton quería fusilar un icono
China no sólo es un gigante en cuanto a extensión de territorio, población, músculo industrial o innovación, el país comunista tiene una legislación tan particular que permite a sus fabricantes hacer cosas impensables en otros mercados mientras a los fabricantes extranjeros les pone alguna que otra pega.
Foton Motor es una de las corporaciones de automoción más poderosas de China, con una larga trayectoria fabricando camiones, autobuses, maquinaria de construcción y vehículos agrícolas. Es más, es el cuarto fabricante de vehículos a motor en China.
No es por tanto una marca de coches al uso (aunque tiene algunos monovolumen y pick-up ya en su catálogo), pero quiere hacer sus pinitos y por eso ha desarrollado una pick-up a medio camino entre camión y turismo todoterreno para entrar en un mercado nuevo. Para tener un éxito más o menos garantizado, Foton ha decidido tomar inspiración en una pick-up con tablas como la Ford F-150. Ni más ni menos que el coche más vendido en Estados Unidos durante 44 años consecutivos (de 1977 a 2020).
El resultado es una pick-up enorme cuyo frontal parece directamente fusilado a la F-150, incluyendo los característicos faros delanteros con luz diurna LED en forma de doble C y una parrilla gigante que encierra el nombre de la marca con unos grafismos que incluso se asemejan a los que utiliza Ford en su pick-up.
También hay características similares en los laterales con los enormes pasos de rueda con protecciones o las inserciones de aspecto metálico sobre las aletas delanteras. La parte trasera es mucho más convencional, al estilo de los modelos que la marca ya tiene en su catálogo aunque con un paragolpes trasero muy marcado.
Bajo el descomunal capó de la General G9 se esconde un motor 2.0 gasolina con 238 CV y 390 Nm de par motor y dos diésel de 2.0 y 2.5 litros. Nada que ver con las mucho más musculosas opciones de la F-150. Todas las opciones se asocian a una caja de cambios automática de ocho relaciones.
Finalmente la General G9 parece que quedó como un prototipo que dio vida a la Foton Tunland G, una pick-up con algunos rasgos parecidos a la F-150 pero sin ser tan cantoso.
La Foton General G9 no es ni mucho menos la primera copia china. Esta práctica común nos ha traído ya calcos como el Landwind X7 con el que Jiangling Motor se metió en juicions contra Land Rover, el Jiangling (otra vez) T7 copiando a la Volkswagen Amarok o Huansu Auto que imitó al Lamborghini Urus aunque se quedó sólo en la intención.
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