Probablemente que un servicio de champán sea uno de los extras de un coche resulta hasta extraño, pero no lo es tanto cuando ese servicio de champán va incluido en el precio de un Rolls-Royce Phantom Drophead Coupé que además es una unidad exclusiva para el Pebble Beach Concours d’Elegance.
Beber champán a cualquier hora, sobre todo si es un champán de altos vuelos, sólo está al alcance de personas con una cuenta bancaria lo bastante saneada como para poder permitirse un coche de más de medio millón de euros. Sería curioso ver a este coche de picnic, aparcado bajo un viejo roble junto a un mantel de cuadros sobre el cesped de la capiña británica. Una estampa digna de foto.
Lo que no es curiosos sino predecible es el nivel de acabados de este Rolls-Royce Phantom Drophead Coupé Pebble Beach 60th Anniversary Special Edition, que como su extenso nombre indica, es un modelo único diseñado para celebrar el 60 aniversario de uno de los más exclusivos concursos de elegancia automotriz. Su precio no importa, lo único que importa es que encontró comprador a los pocos minutos de su presentación. Vamos, que se los quitan de las manos…
En Motorpasión | Rolls-Royce Phantom Coupé Shaheen