Viene con retraso porque estaba anunciado inicialmente para 2017, pero al menos ya sabíamos que el futuro SUV de Rolls-Royce estaba en camino desde que a finales de 2016 anunciaron que se encontraba en fase de desarrollo. Ahora la firma de superlujo ha confirmado que su SUV se llamará Rolls-Royce Cullinan.
No supone ninguna sorpresa el nombre, pues hasta ahora la iniciativa se conocía bajo la denominación 'Proyect Cullinan', pero junto a la confirmación oficial, la marca inglesa ha liberado algunas fotos más de su prototipo haciendo lo que mejor se supone que sabe hacer: lucir palmito en entornos complicados.
Rolls-Royce Cullinan: la conjunción suprema entre lujo y offroad
El nombre de Cullinan no es casual, es un guiño a la cultura del lujo extremo pues hace referencia a un diamante de 3.106 quilates descubierto en la localidad sudafricana de Cullinan hace más de un siglo.
Las características del primer SUV de Rolls-Royce son tan impresionantes como sus exageradas dimensiones exteriores capaces de hacer sonrojar a un Bentley Bentayga, equipando un chasis íntegramente realizado en aluminio igual que ocurre en el Rolls-Royce Phantom al que se le monta un motor de 12 cilindros en uve con doble turboalimentación y una caja de cambios automática de ocho velocidades.
El resultado será un majestuoso todocamino con una potencia de 570 CV transmitidos a las cuatro ruedas a través de un nuevo sistema de tracción total especialmente diseñado para este nuevo modelo.
Será complicado que los propietarios de un SUV con un precio de seis cifras decidan salirse del asfalto, pero por si lo hacen el Cullinan está siendo probado en Oriente Medio, Africa o el Círculo Polar Ártico, por lo que es de esperar que la electrónica equipe modos de conducción específicos para rodar sobre superficies deslizantes.
Ahora ya sólo nos falta saber la fecha en la que el Rolls-Royce Cullinan llegará al mercado, pero los rumores dicen que podría desembarcar a lo largo de este 2018, quizá durante el Pebble Beach Concours d'Elegance del mes de agosto.