No es broma. La misma pregunta se ha planteado en los cuarteles generales del Grupo Volkswagen, así que la respuesta ya ha sido formulada. Quien guarda un Bentley en su garaje, tiene de promedio ocho coches; quien ha podido hacerse con un Bugatti, también ha adquirido 84 coches, tres jets y un yate. Por lo menos así lo plantea Wolfgang Dürheimer, CEO de ambos fabricantes.
Así es como queda claro hacia dónde se dirige cada marca. Bentley presenta modelos nuevos mientras mantiene su imagen de superlujo; Bugatti, en cambio, sigue empeñada en lanzar ediciones especiales del Veyron para conseguir vender las menos de veinte unidades que aún buscan dueño.
Se sabe que el Grupo Volkswagen se encuentra ajustando las tuercas del sucesor del Bugatti Veyron. Algunos cuentan que podría ser híbrido, otros se atreven a ponerle fecha de lanzamiento en el calendario; Bloomberg, incluso, menciona que Bugatti podría estar probando tres concept-cars diferentes para el relevo del máximo deportivo de VAG.
De acuerdo con el analista Max Warburton, de Sanford Bernstein Ltd., Volkswagen ha perdido alrededor de 4,6 millones de euros por Veyron vendido, debido al costo del desarrollo. Este problema lo viene arrastrando desde 2005, pero parece no importarle demasiado. Finalmente, el Bugatti Veyron le ha ayudado a romper récords de velocidad y conseguir una imagen favorable del grupo.
Vía | Bloomberg