Motor y acelerador de desbrozadora, depósito de mini-moto, asiento y manillar de bicicleta. Lo tenía todo para triunfar como vehículo de movilidad personal hecho a medida, pero no. Un hombre de 36 años que se montó su propio patinete motorizado se vio sorprendido por los agentes de la Guardia Civil, que lo denunciaron por conducir por las vías públicas un artefacto rodante que incumple lo establecido en el Reglamento General de Vehículos.
Si lo pensamos un poco, es como para echarse a reír... o a llorar.
Sucedió en la carretera LU-530, que conecta en Galicia Lugo con la localidad de A Fonsagrada. A falta de informaciones detalladas, imaginemos la cara de estupor que debieron de poner los agentes de la Benemérita cuando vieron llegar a aquel hombre, tan feliz de la vida a lomos de su descacharrante creación.
Y después, el jarro de agua fría. Mire, le hemos hecho parar porque eso que lleva ahí no es conforme a lo que establece la ley. Haga el favor de mostrarnos su DNI. Bien. Mire, pues... nos vemos obligados a denunciarle por infracción muy grave al artículo 1 del Reglamento General de Vehículos, debido a que usted circula con un vehículo que carece de la correspondiente autorización administrativa.
La guasa del asunto está en la proliferación de vehículos de movilidad personal (VMP) que están llegando a nuestras calles y carreteras a toda velocidad, y que han pillado con el paso cambiado a todo el mundo, incluidos los legisladores y hasta algunos fabricantes, que —nos consta— no se esperaban el éxito comercial que han tenido todos estos dispositivos.
Tanto es así, que semanas atrás la propia DGT envió una Instrucción para intentar poner orden en la circulación urbana de los monociclos a motor, los Segways, los overboard, los patinetes eléctricos...
La cuestión de fondo es que la legalización de vehículos es algo que se realiza en primer lugar a nivel comunitario, y de ahí pasa luego a los Estados de la Unión Europea, formalizándose en unos reglamentos que, al paso que vamos, para cuando quieran estar aprobados quizá ya se hayan quedado obsoletos.
Y mientras, a un hombre lo castigan por llevar a la carretera algo que está tan poco regulado como muchos de los artefactos rodantes made in China que uno bien puede comprar por catálogo, que estamos de Black Friday y nos los quitan de las manos, rubia.
Respeto para este MacGyver de Galicia
Lo más relevante del caso quizá no se encuentra en el histriónicamente atónito tweet de la DGT, sino en la amplia variedad de respuestas que le está dando la gente en Twitter a este caso, de entre las cuales destaca la llamada al respeto por el ingenio de una persona, de cuya identidad no se han facilitado datos.
Entre los argumentos esgrimidos, los que buscan premiar la creatividad, los que denuncian la falta de cintura en la ITV ante todo aquello que se sale del guión, los que quitan hierro al asunto porque otros muchos hierros hay que circulan por las carreteras sin que nadie les dé el alto... Another day in Paradise.