El Fiscal de Sala Coordinador de Seguridad Vial, Bartolomé Vargas, ha remitido este jueves un escrito a las Policías Locales de toda España en el que pide más controles de velocidad y alcoholemia en ciudad.
Vargas ha explicado en rueda de prensa las claves de tal documento, y ha afirmado que pese a los nuevos límites de velocidad implantados en las urbes, "no es posible que el límite se respete si no se incrementa el funcionamiento de los radares, en concreto de los radares móviles".
El fiscal ha aseverado que los radares y las sanciones administrativas "educan", y que los cinemómetros "no son recaudatorios, son protectores de los conductores y evitan múltiples tragedias".
Vargas también ha solicitado aumentar los controles alcoholemia en las carreteras, al tiempo que ha recordado que la velocidad está implicada en aproximadamente el 30% de los fallecidos y el alcohol en un 25%, según recoge Europa Press.
No obstante, según las últimas cifras de la Fiscalía (correspondientes a 2019), las condenas por exceso de velocidad fueron 394, lo que constituyen "no demasiadas", en comparación con las condenas por alcohol, que ascienden a 48.078.
En este sentido, cabe recordar exceder en más de 60 km/h el límite de velocidad permitido en ciudad, es decir, circular a más de 90 km/h, es una infracción catalogada como delito.
Lo mismo ocurre con los conductores que conduzcan con una tasa de alcohol superior a 0,60 mg/l.
Sin embargo, el fiscal ha pedido a las Policías de toda España que también instruyan atestado por delito en el caso de que un conductor haya arrojado una tasa entre 0,40 mg/l y 0,60 mg/l y denote signos claros de embriaguez o realice maniobras irregulares, a pesar de que solo constituye delito la conducción con una tasa superior a 0,60 mg/l.
Las aplicaciones como Waze o Social Drive, en el punto de mira de la Fiscalía
Por otra parte, Vargas ha señalado que se está trabajando para evitar que en las aplicaciones como Waze, Social Drive o de forma más reciente, Google Maps, se avise de la presencia de radares y controles policiales.
Así, el fiscal ha solicitado información a las policías acerca de si estas apps que alertan a los conductores de la ubicación de controles continúan perturbando su normal funcionamiento, en qué medida y con qué modalidades, con el fin de "fundamentar aún más la propuesta de reforma sancionadora en la que trabaja el Ministerio Fiscal". Algo que se espera tener en "dos o tres meses".
La Fiscalía de Seguridad Vial ya anunció sus planes contra estas aplicaciones en abril de 2019, y más recientemente la DGT abogó por poner coto a los chivatazos de controles policiales.
En otros países como Francia ya está está prohibido desvelar explícitamente dónde están los controles policiales, de modo que en las apps se señalan puntos de especial atención y peligro... que en muchos casos viene a alertar de lo mismo.
"La tecnología, sobre todo, ayuda, pero en algunos casos se utiliza indebidamente. Un control de alcoholemia salva vidas", ha concluido Vargas.
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