El prototipo que ha llevado Nissan al Salón de París podría definirse como La Furgoneta Blanca™ 2.0, aunque su estética exterior se aleja bastante de lo que estamos acostumbrados a ver en el segmento de los vehículos comerciales. El Nissan Townpod Concept se podría decir que es la evolución del Nissan Cube hacía una furgoneta.
El aparato es curioso cuanto menos, mezclando en un mismo concepto el interior de un compacto futurista con el espacio de carga de una furgoneta clásica pero sin perder la habitabilidad del primero. Sus formas exteriores ayudan a esta percepción, con un techo alto y una posición del habitáculo avanzada.
Es eléctrico, pero en el comunicado de Nissan no hacen referencia ni a su potencia, ni sus características técnicas y tampoco a su autonomía. Lo único que nos dicen es que usa el mismo sistema que el Nissan Leaf, por lo que podemos esperar una autonomía de unos 150 km gracias a sus baterías de litio y 107 CV.
Dentro del Nissan Townpod Concept
Para solucionar el aprovechamiento del espacio de carga sin restar practicidad a los asientos traseros en el Nissan Townpod Concept se ha recurrido a la misma solución que en el Peugeot HR1 Concept pero aquí gracias a un mayor espacio interior, parece mejor resuelto y no tan agobiante.
El suelo de la zona de carga del Nissan Townpod Concept es totalmente plano y la fila de asientos traseros se desliza hacia adelante o hacia detrás según sean las necesidades de carga. En caso de querer aprovechar al máximo la zona de carga, estos asientos se ocultan tras los asientos delanteros. Prácticamente, es como si se hubiesen eliminado, pero sin la incomodidad de tener que demontarlos y dejarlos en cualquier sitio.
El salpicadero del Nissan Townpod Concept es simple, pero funcional. Dispone de dos pantallas localizadas en el centro del mismo que muestran diferentes funciones. La superior se encarga de informar sobre la velocidad, estado de carga de las baterías, autonomía y sistema de navegación. La pantalla inferior se encarga de controlar el navegador y el sistema de audio, además de los chequeos del coche.
Una de las premisas de los diseñadores del Nissan Townpod Concept es que sea el propio conductor quien module el interior del coche a su gusto. Para ello han inventado el sistema modulable Puck, que vemos en la imagen superior. Se trata de unas pelotas que hacen las veces de soportes para vasos, bandejas, iPod y un largo etcétera.
A partir de accesorios de la propia Nissan o de otras marcas, cada usuario podrá elegir el tipo de soporte que necesita. Estas pelotas se guardan en un compartimento de la puerta del acompañante. Lo mismo sucede con la zona de carga, completamente modulable y que dispone de una apertura superior para cargas de gran tamaño.
Las nuevas tecnologías también están presentes en este prototipo. Gracias al Bluetooth, el navegador se comunica con la agenda del smartphone del conductor y traza las rutas necesarias para el día completo, sin necesidad de manipulación. Si surge algún retraso, y dos citas se solapan, el sistema avisa al conductor para que éste elija lo que más le convenga.
Un diseño demasiado atrevido
Las últimas tendencias de diseño de Nissan no van enfocadas precisamente a los convencionalismos. Lo hemos visto en el Nissan Cube y en el Nissan Juke, por poner dos ejemplos recientes y en este sentido el Nissan Townpod Concept es otro exponente más. Pese a estar orientado hacia un público joven, emprendedor y tecnológico, puede que se exceda en este sentido.
Pero su atrevido diseño no le resta funcionalidad. El portón trasero se ha divido en dos y las bisagras le permiten la apertura en condiciones de poco espacio, gracias a un sistema que las repliega sobre los laterales del coche sin tener que abatirlas completamente. En los laterales se ha eliminado el pilar B. Buena idea, pero yo hubiese puesto una puerta corredera en lugar de una batiente.
Otro detalle curioso son sus grupos ópticos. Los delanteros están al aire, facilitando las labores de mantenimiento (y dejándo sus conexiones a la vista de todo el mundo, claro). Los intermitentes delanteros y traseros se integran en la carrocería y tienen la función de catadióptricos cuando están apagados.
Como las luces traseras están integradas en el portón trasero, cuando éste se abre deja a la vista otro grupo de luces, en el umbral del espacio de carga para asegurar la visibilidad en cualquier posición de las puertas. Una solución creativa y verdaderamente funcional.
¿Veremos una Furgoneta Blanca™ tan atrevida en un futuro cercano?
En Motorpasión | Nissan Townpod Concept, otro teaser para el Salón de París