He estado hace unas horas en el Salón del Vehículo de Ocasión de Madrid, el más importante salón VO de España. Es una oportunidad para comprarse un coche usado a precios interesantes, porque tienen rebajas adicionales o importantes facilidades de compra. En un momento en que el coche nuevo está de capa caída, la ocasión recupera protagonismo.
Me he acercado como un visitante más, sin acreditación de prensa, usando una invitación (si no, 5 euros). Ha sido periodismo de guerrilla, para comprobar de primera mano cómo es el tinglado. Tenemos tres pabellones ocupados en el IFEMA, 3.000 coches según la nota de prensa, pero dentro no hay tantos, si bien hay acceso indirecto a través de catálogo a todos ellos.
Los coches suelen venir de particulares, gerencia, flotas de prensa (aunque no he encontrado a ningún “conocido”) e incluso empresas de renting. Hay desde unidades con cero kilómetros con un buen descuento hasta algún que otro clásico. El más baratito es un Kia Picanto, el más caro es un Ferrari F360. Hay de todo.
Mercedes-Benz no tiene problemas para alquilar espacio…
Nada más entrar, uno topa con la zona de Mercedes-Benz, con sus propios seminuevos. Han cogido tanto espacio, que diríamos que incluso les sobra, y no se cotiza barato el metro cuadrado en estas ferias. Otras marcas y empresas han apretado un poco más su oferta de coches. Esta marca ofrece como incentivo en muchos coches el seguro gratuito.
Todos los coches que se venden aquí tienen garantía, kilometraje certificado y descripción de su origen: dueño, tipo de uso, kilómetros, etc. Los coches que han sido de empresas de renting vienen indicados como tales sin ningún tapujo. Tienen sus ventajas: poca edad, revisados a conciencia (no siempre en taller oficial), etc.
No es como ir a cualquier salón del automóvil, al menos un día laborable. Hay mucho menos agobio para mirar coches, no hay azafatas buenorras, ni apenas regalitos, pero hay menos humanidad y eso facilita la tarea. Lo que sí hay es mucho vendedor encorbatado que intentará hacer un buen negocio, y de paso, que uno también lo haga.
Al loro con las garantías, a veces igual que uno nuevo o mejor
La mayoría de los coches tienen un descuento de 1.000 euros sobre el precio que tienen en las exposiciones donde están normalmente. Varias marcas estan oficialmente con su programa de coches usados: Audi, BMW, Peugeot, SEAT, Toyota, Volvo… Las condiciones para incentivarnos pueden ser muy variadas.
Por ejemplo, BMW ofrece financiación triple cero (0% de comisión en apertura, estudio y cancelación). Peugeot nos ofrece unas cuotas muy fáciles de pagar el primer año. Volkswagen da un interés más bajo del normal. Lexus da una garantía de hasta tres años ó 500.000 kilómetros (cifra correcta), otros regalan una televisión, etc.
También tenemos a varias empresas de compra y venta de coches, que también tienen sus ofertas. La garantía más baja que he visto es de un año, la más alta de cuatro, dependiendo del coche. Una de las ventajas de comprar a alguien que no es particular es esa, la garantía, y otras medidas que dan confianza, como la de devolución en menos de 1.000 km.
Chevrolet Corvette Targa (2005)
Todos los coches se pueden probar, normalmente sin compromiso. Quien te niegue ese derecho, pasa de su coche. El que no esté abierto, te lo abre un vendedor. Prácticamente todos los coches están exteriormente impecables, por dentro casi todos presentan un estado bastante bueno, pero pueden encontrarse signos de deterioro en algún caso.
Para reclamos, la zona de Peugeot, que tiene rodeado de 207 y 308 un Chevrolet Corvette C6 Targa automático, 34.900 euros y 26.000 km. Además de un imán para visitantes, también es el vivo retrato de la crisis. El dueño de ese coche, que hasta le puso detector de radar (a 120 no iba, no), lo vendío para comprarse un Peugeot, espero que mínimo un 407 Coupé V6.
He visto varios coches que me gustaban. Pedí precios por un par de ellos, con financiación, y ellos te calculan los plazos. Dependiendo de la financiera que trabaje con el vendedor, sale más o menos ventajoso. Por ejemplo, en la misma marca, un comercial me ofrecía 0% de comisión al amortizar plazos y otro me pediría un 3% de penalización.
Ford Mustang GT Roush (2006)
Chollos en el Salón del VO
No voy a nombrarlos todos, pero hay cosas muy interesantes, especialmente si es gasolina y consume mucho. Por ejemplo, este Ford Mustang GT Roush cuesta tan solo 39.900 euros, con 68.000 km encima, modelo de 2007. También hay un par de Hummer H2 con un precio curioso, porque esos cacharros no los quiere casi nadie ya.
En alta gama podemos encontrar un precioso Maserati Coupé de 2003 (4.3 390 CV) por la ridiculez de 34.000 euros y con 55.000 km. Por poco más, 40.000 euros, también podemos llevarnos prácticamente un Nissan 370Z Roadster con 15.000 km. Por debajo de 25.000 también se pueden encontrar un par de Nissan 350Z Coupé.
De superlujo tienen un Bentley Turbo R (1990, 6.7 192 CV), casi 92.000 km y 26.900 euros. Lo que ahorras en comprarlo lo gastarás en la gasolinera en un mes. Cerquita tiene un Rolls-Royce Corniche IV (1993, 6.7 224 CV), 109.000 euros. Solo llegaron dos a España, y la unidad es única por la madera que tiene en guarnecidos, y por ser el último de la era pre-BMW.
Audi RS6 (2002)
¿Qué me decís de este Audi RS6 (2002, 4.2 Biturbo 450 CV)? Equipado a tope, 50.300 kilómetros y 26.500 euros. Por cuatro veces más está el modelo nuevo vigente, carrocería Avant, a su derecha (2009 5.0 Biturbo 580 CV). Pero hay muchos Audis con motorizaciones más humildes, por ejemplo, los Audi S3 están baratitos, a ventitantos mil euros.
También hay muchísima oferta de bemetas BMW. He visto un BMW 335i Coupé de los primeros (2006, 3.0 Biturbo 306 CV) que si me faltasen 40 tornillos (y más solvencia) me lo habría comprado. Cerquita encontraremos un Lexus IS-F esperando adopción por 54.000 pavos unidades monetarias europeas.
En presupuestos más contenidos, por ejemplo SEAT Ibiza a puntapala por 12.000 euros, y por poco más se puede rescatar del aburrimiento un SEAT León FR de 200 CV. Otra de las oportunidades del Salón del VO es comprobar cómo se deprecian unas marcas o modelos concretos, hay casos muy llamativos.
Sigue el camino hacia tu coche de ocasión
¿Coche de ocasión? ¿Por qué?
La primera razón es el ahorro. Un coche en su primer año pierde un 20% de su valor, pero es que recién puesto en la calle ya ha perdido mucho valor. A cambio de unos miles de euros, le “pagamos” a otro por rodar el coche. Desengáñate, nunca desvirgarás un coche, ya lo hicieron en la fábrica o en la campa al descargarlo del barco.
Muchos coches podremos tenerlos sí y solo sí se han depreciado o si los robamos, como un Ferrari expuesto por 80.000 euros, vale, con 10 años, pero su diseño es intemporal, y es un Ferrari. Se supone que nos dan buenas garantías por si algo sale mal, pero ¿va a salir siempre mal? Ni en coche nuevo uno está exento de dicho riesgo.
La confianza es eso que convence a unos caballeros de que ese Volvo no les va a caer encima de la cabeza. Sí, puede caerse, pero hay garantía en forma de soportes que aguantan en conjunto dos toneladas (el coche no pesa eso). Es cuestión de pasarse, babear, y tener un arrebato en coordinación con algo de dinero en el bolsillo. Yo fui con 20 euros, y me quedé con las ganas.
Un galo nunca se pondría debajo de ese coche
Comprar un coche de ocasión es algo parecido a encontrar pareja. Uno puede arriesgar y ganar, o dejar pasar la oportunidad por si salimos mal parados. Dicen que sin riesgo no hay gloria. Un coche nuevo nos puede salir gafe total y uno de ocasión durarnos hasta que nos aburramos de él o lo vendamos. Todo puede ocurrir.