Probamos el Dacia Spring 65 CV: el coche eléctrico más barato ahora es más potente, pero sigue siendo barato

Dos años después de lanzar el Dacia Spring, la marca rumana actualiza el coche eléctrico más barato del mercado con una versión mejor equipada y con más potencia.

Se llama Dacia Spring Extreme, tiene 65 CV (20 CV más) y un diseño específico para ganar atractivo, pero sigue teniendo un precio contenido. La nueva versión llega poco después de que el urbano de cero emisiones haya adoptado la nueva imagen de marca de Dacia con el nuevo logotipo.

La filosofía del precio justo

Si Dacia lleva varios años arrasando no solo es porque vende coches baratos, sino porque lo que vende se ajusta a las necesidades de muchos conductores. Cuando llegó a Europa era una marca low-cost, pero ha evolucionado y ahora podemos definirla como la marca del precio justo.

Muchos conductores solo buscan un coche para ir del punto A al punto B. No es que quieran un coche barato, es que no necesitan un coche caro para satisfacer sus necesidades. Dacia se dio cuenta cuando comprobó que sus clientes compraban más unidades de sus acabados tope de gama que de las versiones básicas. Simplemente se trata de pagar por lo que se recibe, ni más, ni menos.

Con la subida de los precios de los coches de los últimos años, este tipo de clientes se han multiplicado porque con muchos modelos da la sensación de que su precio no se correspondo con lo que dan, o dicho de otra forma: no valen lo que cuestan.

Por eso ha crecido tanto la popularidad de Dacia y sus coches se venden tan bien. También es verdad que los coches que forman su gama actual no tienen nada que ver con ese Sandero básico que se vendía hace años por 7.700 euros; son coches bastante más caros en cualquiera de sus versiones, pero ofrecen el atractivo de tener un precio acorde a lo que dan, sin dejarse nada, pero también sin pretensiones.

Solo hay que ver el Dacia es Spring: es pequeño, es tan sencillo que es más correcto llamarlo básico, es poco potente y no tiene ni una sola concesión al lujo, pero es el coche eléctrico que mucha gente llevaba esperando años.

Por un lado, porque cumple con lo promete, sobre todo si alguien se plantea comprarlo como segundo coche para la ciudad. La potencia que tiene (45 CV) es suficiente para cubrir cualquier trayecto urbano e interurbano, en parte porque solo pesa 1.045 kg.

Su autonomía de 230 km en ciclo combinado WLTP permite utilizarlo durante varios días en ciudad sin tener que cargarlo. Hay que tener en cuenta que la mayoría de conductores cubre distancias mucho más cortas en una jornada normal.

Es tan pequeño (3,73 metros de largo y 1,58 metros de ancho) que se aparca en cualquier lado, aunque tiene espacio para cuatro personas en su interior y un maletero con 270 litros de capacidad, el mismo volumen que ofrece el Toyota Yaris del segmento superior.

Por otro lado, el Dacia Spring encaja con muchos clientes (se han vendido más de 110.000 unidades en Europa desde finales de 2021) porque es el primer coche barato de verdad que se vende en nuestro mercado. Hay quien no necesita más.

Cuando llegó en 2021, podía comprarse por 9.550 euros con las ayudas del Plan MOVES III incluido. Ahora es más caro (como todos los coches) y, como mínimo, cuesta 13.555 euros con la bonificación del Plan MOVES III, pero sigue siendo un precio imbatible y, sobre todo, sigue siendo una tarifa acorde a lo que ofrece.

Eso sí, cuando llegó el Spring no estaban a la venta el MG4 Electric y el BYD Dolphin; los dos son más caros que el rumano, pero también son superiores en todos los sentidos, por lo que también se puede decir que cumplen con lo que prometen y tienen un precio justo.

Dacia no ha pasado esta cuestión por alto y ha decidido aumentar el atractivo de su urbano de cero emisiones para que los compactos eléctricos chinos no le resten muchas ventas. Lo ha hecho con una nueva versión denominada Extreme que tiene un diseño más llamativo, equipamiento específico y un motor más potente.

La variante Essential de 45 CV sigue a la venta, pero con el nuevo Spring Extreme, Dacia intenta llegar al mismo tipo de clientes que compran las versiones tope de gama de los Sandero, Jogger y Duster, es decir, los que siguen valorando pagar un precio justo y no quieren algo tan básico como las alternativas de acceso, pero no pueden, no están dispuestos o no necesitan llegar al nivel del MG4 Electric o el BYD Dolphin.

No es que el Spring Extreme juegue en otra liga, pero, para empezar, tiene un diseño “más pintón”. Por fuera, como el resto de Dacia con el acabado Extreme, cuenta con detalles de color cobre, en este caso en los retrovisores, parte de las barras del techo, el logotipo de las llantas, el embellecedor que hay debajo de los faros principales y el logotipo de Dacia del portón.

También incorpora vinilos de color negro en las puertas y la paleta de colores exteriores está formada por cuatro opciones: el blanco, que es el único posible para el Spring Essential y no tiene sobrecoste, y ‘Azul Pizarra’, ‘Gris Gallo’ y ‘Liquen Caqui’ (verde oscuro), todos ellos con un sobreprecio de 500 euros.

Las llantas siguen siendo de acero de 14”, pero en lugar de ser la típica llanta de acero negra tiene un embellecedor que da el pego como llanta de aleación. No hay otra opción disponible y los neumáticos que calza tienen medida 165/70 R14.

Es, por tanto, uno de los coches con las ruedas más pequeñas del mercado, y también son de las más baratas porque cada neumático cuesta entre 40 y 80 euros, en función de la marca y el modelo; la unidad de pruebas llevaba Linglong Green-Max HP de verano.

Por dentro también se distingue del Essential por los detalles en color cobre del salpicadero, los aireadores y las puertas, además de por la tapicería, que es en símil de cuero con pespuntes en cobre (la del Essential es de tela).

En lo que respecta al equipamiento, el Essential no tiene pantalla táctil central ni posibilidad de llevarla, mientras que el Extreme incorpora de serie un panel táctil de 7” y conectividad con Apple CarPlay y Android Auto, además de Bluetooth.

También cuenta con navegador, sensor de luces, ordenador de a bordo, ayuda al arranque en pendiente, elevalunas eléctricos delante y detrás, frenada de emergencia, sensor de aparcamiento trasero y cámara trasera, retrovisores con ajuste eléctrico, modo de conducción ECO, aire acondicionado y baqueta trasera abatible.

En pleno 2023 esta dotación es de lo más básica, pero cumple para un segundo coche destinado, principalmente, para el uso en ciudad. Lo que eché en falta es que el botón del ordenador de a bordo estuviese en otra posición porque se encuentra en mitad del cuadro de instrumentos y no es nada cómodo manipularlo, hubiera estado mejor en el volante, donde están los botones del control de crucero y del control por voz.

También sorprende que no tenga regulación del volante, ni en altura ni en profundidad. Como tampoco se puede ajustar la altura de los asientos delanteros, dar con la postura de conducción correcta no es fácil. Al menos la visibilidad es buena en todas las direcciones.

Tampoco sobra espacio en anchura delante y es algo que notarán enseguida las personas más anchas. Detrás son plazas más indicadas para niños que para adultos, pero sirven para salir del paso en trayectos cortos, aunque el espacio para las piernas es muy justo y si el conductor es alto, es probable que el pasajero que se siente detrás le clave sus rodillas en la espalda a través del asiento, que es muy blando y fino.

Más allá del diseño, la habitabilidad, el equipamiento y la calidad, el principal atractivo del Dacia Spring Extreme son sus 20 CV extra respecto al Dacia Spring Essential. El nuevo tiene un motor eléctrico desarrolla 65 CV y el Essential se conforma con 45 CV.

La batería es idéntica en las dos versiones: de iones de litio de 27,4 kWh de capacidad. Puede cargarse a una potencia máxima de 6,6 kW en CA y a una potencia máxima de 30 kW en CC.

Como el de 65 CV pesa lo mismo que el de 45 CV (1.045 kg), homologa 220 km de autonomía en ciclo combinado, la misma cifra que el menos potente. La diferencia llega al hablar de prestaciones: según Dacia, el de 65 CV acelera de 0 a 50 km/h en 3,9 segundos, por lo que es 1,9 segundos más rápido que el de 45 CV.

Al volante se nota mucho la mejora. Obviamente, con 65 CV no es un cohete, pero su bajo peso y la entrega de potencia instantánea del motor eléctrico le permiten moverse muy bien por ciudad, hasta el punto de que es fácil ser el más rápido al salir de los semáforos, al menos hasta que se alcanzan unos 50 km/h.

Urbano, en el sentido estricto de la palabra

Cuando llega a los 70 km/h la cosa cambia y cada vez le cuesta más alcanzar velocidad, pero la diferencia con el de 45 CV sigue siendo notable. Dacia asegura que hace en 13,5 segundos la recuperación de 80 km/h a 120 km/h, mientras que el de 45 CV necesita 26 segundos.

De cualquier manera, en carretera obliga a tomarse las cosas con calma, aunque llega hasta los 130 km/h de marcados, por lo que puede circular perfectamente por carreteras secundarias y autovía. Claro que el aislamiento no es su fuerte y a 100 km/h la sonoridad en el interior es muy alta, tanto que da la sensación de ir más rápido.

Lo que está claro es que está hecho 100% para ciudad y en ese escenario se encuentra especialmente cómodo, no solo porque es ágil a baja velocidad, sino porque es muy cómodo al tener una suspensión tan blanda y, sobre todo, porque es muy fácil de conducir:  gira muy bien y, al ser tan pequeño, es facilísimo hacer maniobras.

Esa es una de las principales virtudes del Spring, teniendo en cuenta que los utilitarios y SUV urbanos son cada vez más grandes y que apenas quedan coches del segmento A.

Hace años la oferta de este tipo de modelos era muy amplia y muchos conductores se decantaban por ellos cuando buscaban un segundo coche, por lo que el Spring viene a ocupar el hueco que dejaron coches como el Toyota Aygo, el Citroën C1, el Peugeot 108, el Seat Mii, el Volkswagen Up! o el Skoda Citigo.

Bien es verdad que es más caro que todos los modelos mencionados, pero ya sabemos lo que hay ahora: todos los coches cuestan más que antes. Puede comprarse nuevo, al contado y sin ayudas a partir de 20.555 euros (Essential de 45 CV) y con todas las ayudas del Plan Moves III esta versión pasa a costar 13.555 euros.

El Extreme de 65 CV tiene un precio de partida de 22.705 euros (1.650 euros más que el Essential de 45 CV). Cualquiera de los dos está disponible con entrega inmediata, una opción que Dacia no ofrecía en España hasta ahora.

Además de estas dos versiones, Dacia vende el Spring Cargo enfocado a clientes profesionales. No tiene asientos traseros, es de color blanco y solo se ofrece con el motor de 45 CV; está a la venta desde 20.955 euros.