Ya han pasado casi dos años desde que el Porsche 935 Clubsport viera la luz. Esta reinterpretación moderna del legendario Porsche 935/78, concebida sobre el 911 GT2 RS Clubsport y apta sólo para circuitos, estaba limitada a 77 unidades. Y ahora una de ellas ahora está a la venta por la escalofriante cifra de 1,45 millones de euros.
Este 935 Clubsport se destaca por dejar al descubierto la fibra de carbono de su carrocería, una de las configuraciones estéticas presentadas por la marca para este exclusivo modelo. Y es que el 935 resucitado contaba con un amplio abanico de opciones estéticas, más de las que posiblemente vieron la luz, entre las que encontrábamos los colores de los modelos de competición históricos de Porsche como el Gulf o el Sachs.
Lo comercializa Hollmann International, una firma de concesionarios germana especializada en modelos de lujo, así como en preparaciones de altos vuelos. Y en el caso de esta unidad su precio asciende a los 1,45 millones de euros (antes de impuestos), el doble de los 700.000 euros de los que partía el Porsche 935 Clubsport. Pero claro, las raras avis tienden a revalorizarse y desde luego este modelo lo es.
Además, no es el único 935 actualmente en venta: DPM Motors, en Mónaco, vende otro ejemplar decorado con los colores de Coca-Cola. Seguramente su precio será igualmente elevado, pero en su caso no lo publican.
A la rica fibra de carbono
Así, este Porsche 935, que no es de venta exclusiva en Alemania pues como indica en su ficha Hollmann International puede exportarse a otros mercados, deja a la vista la fibra de carbono en la que está concebida su carrocería, en combinación con las llantas turbo-fan de 18 pulgadas que, en su caso, van pintadas en un llamativo naranja.
Además, el concesionario afirma que sólo ha recorrido 60 kilómetros, por lo que está prácticamente está a estrenar: ahora sólo queda que alguien pague su estratosférico precio y de rienda suelta a todo su potencial en circuito.
Recordemos que el Porsche 935 es uno de los modelos más exclusivos nacidos en los cuarteles de la marca alemana y una de sus producciones más limitadas. Tomando como base al bestial Porsche 911 GT2 RS, cobra vida gracias a su mismo propulsor: un bóxer biturbo de seis cilindros y 3.8 litros de 700 CV. Una brutal entrega para 1.380 kilos de peso.
Este bloque en el 935 va gestionado por la tradicional caja de cambios PDK de siete velocidades de la firma, y en el menú encontramos por ejemplo unos frenos de disco de acero ventilados con pinzas en aluminio, de 380 mm en el eje delantero y 355 mm en el trasero, un gigantesco alerón de caso dos metros de ancho o salidas de escape de titanio (inspiradas en el Porsche 908 de los años 60).
El habitáculo nos recuerda que es un coche sólo apto para circuitos. De hecho su volante en fibra de carbono y el display son idénticos a los 911 GT3 R 2019 de competición. Además, cuenta con jaula antivuelco y baquets de competición con arneses de seis puntos, que, por cierto, en el caso de esta unidad sólo cuenta con uno, no sumando el segundo asiento opcional. ¿Qué afortunado se hará con sus servicios?
Fotos: Hollmann International.
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