Restaurar la pintura de un Porsche 911 es un proceso como de otro planeta (y algo asqueroso)

Restaurar la pintura de un Porsche 911 es un proceso como de otro planeta (y algo asqueroso)
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El proceso de preparación para quitar la pintura de un coche en mal estado es tan absolutamente meticuloso que puede deparar muchas sorpresas, entre ellas descubrir que tu coche tiene tres capas de pintura debajo de la que tú veías. Los procesos químicos que tienen lugar durante el repintado son como de otro planeta, como si la pintura tuviera vida propia.

Los GIF que vas a ver desvelan lo que le ocurre a la maltrecha pintura de un Porsche 911 que necesita urgentemente una restauración. El desarrollo del repintado se convierte en toda una película de terror, sobre todo si eres el dueño y ves en vivo y en directo lo que le están haciendo a tu Porsche.

Dentro de la ardua tarea que supone restaurar un coche, el de acabar con la pintura en mal estado es de los pasos más complejos, como estás a punto de comprobar. Lo primero que hay que hacer es proteger los bordes para que nada pueda colarse por debajo del capó.

Después, se vierte un producto específico que acaba con la pintura y se cubre con un plástico para acelerar el proceso. Tras 10, 15 minutos, el resultado a corta distancia es como el escenario de Alien o de un crimen. Un crimen contra un Porsche 911.

Tras repetir el proceso tres veces, se descubre que el Porsche había pasado hasta tres veces por un repintado. Mira, mira...

Primero, se echa el brebaje

Tras 15 minutos, podemos disfrutar del asqueroso efecto

Y ahora, la parte satisfactoria: retirar el producto

Pero no hemos terminado, hay que repetir el tratamiento, y rascar hasta tres capas de pintura anteriores

Y aquí tienes el proceso al completo.

Sencillo, ¿eh?

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