El Porsche Taycan ha llegado para hacer historia, o al menos eso prometen desde la marca alemana. El Taycan está llamado a cambiar la imagen de Porsche, mientras se beneficia de los conocimientos que atesora Porsche en materia de deportividad. Y el trabajo realizado en el chasis del Porsche Taycan es una buena muestra.
Todo el cuerpo del Porsche Taycan está compuesto de una combinación de materiales específica. El chasis principal está compuesto de dos tipos diferentes de acero (moldeado en frío y en caliente: 40% y 23% del total) mientras que la carrocería y las partes delantera y trasera del chasis están realizadas en aluminio (18%).
La zona baja y el soporte para las baterías son de aluminio extruido (11%) mientras los soportes de la suspensión y algunos elementos más de la parte delantera se han realizado en aluminio moldeado (8%).
Por su parte, el chasis que sujeta a la batería forma a su vez parte integrante de la estructura del vehículo con el fin de minimizar el peso e incrementar la rigidez estructural. La batería se sujeta a su estructura con un total de 28 tornillos.
En total, para construir todo el cuerpo de cada Porsche Taycan se han de emplear un total de 3.139 puntos de soldadura, 5,7 metros de soldadura de gas activo, 7,5 metros de soldadura de gas inerte. 734 remaches más 1.642 puntos de remache semitubular.
Aparte de una imagen inequívocamente Porsche, el Taycan utilizará el sonido como un factor diferenciador. La marca asegura que el Taycan tendrá un sonido distintivo al igual que lo tienen el resto de coches de su gama, incluyendo en opción el Porsche Electric Sport Sound como equipamiento opcional.
La aerodinámica del Porsche Taycan: tres configuraciones y un Cd de 0,22
Las formas exteriores del Taycan encierran un coeficiente aerodinámico de entre 0,22 y 0,25, una silueta dotada de aerodinámica activa con un alerón trasero retráctil, tomas de refrigeración con flaps móviles y un fondo plano totalmente carrozado.
Estos elementos móviles en la carrocería jugarán un papel fundamental en el consumo de energía y las prestaciones. Porsche es muy consciente que cada mínimo detalle cuenta y así ha dotado a su coche eléctrico de tres modos distintos que tienen una influencia directa en cómo interactúa el coche con el flujo de aire.
La aerodinámica activa comienza con una configuración básica en la que el modo Stationary mantiene al coche con la configuración más conservadora: el alerón trasero está plegado y las tomas de aire de refrigeración para los frenos delanteros están abiertas, así se crea una resistencia aerodinámica media sin perder capacidades dinámicas.
El segundo modo preestablecido es el Eco, un modo destinado a incrementar al máximo la eficiencia energética. Con esta configuración el alerón trasero se coloca en una posición baja, con una apertura mínima, al tiempo las entradas de aire frontales se cierran para evitar turbulencias en los pasos de rueda delanteros.
Por último está el modo Performance, el destinado a buscar las mejores prestaciones posibles sobre el asfalto. Aquí el Porsche Taycan actúa como el deportivo que es, despliega el alerón trasero al máximo para mantener la zaga pegada al suelo y los flaps de las entradas de refrigeración se abren para refrigerar los discos de freno que se verán calentados por un uso más intensivo.